Dos bandos, los que crearon la sigla Autonomía Para Bolivia (APB) y los que la tienen ahora pelean en la justicia. Esa llevó a Costas como prefecto.
Costas ante un juez por la sigla de APB
El gobernador cruceño Rubén Costas, susceptible porque tiene en puertas dos procesos penales seguidos por el Gobierno, vivió ayer una jornada primero de incertidumbre y temor porque hasta su oficina llegó nada menos que un mandamiento de aprehensión en su contra.
“Para que cualquier funcionario policial habilitado por ley con facultad de habilitación de días y horas conduzca al testigo Rubén Costas ante el juez cautelar de sentencia, Jorge Gonzales”.
La primera reacción fue de desconcierto teniendo en cuenta que al menos tres autoridades electas el 4 de abril ya son historia: dos alcaldes de Cochabamba y Jaime Barrón de Sucre y el potosino René Joaquino y el gobernador tarijeño Mario Cossío están en la mira.
Averiguadas las cosas se trataba de una citación en un proceso penal por una pugna que tienen dos bandos que se atribuyen la propiedad de la sigla Autonomía Para Bolivia (APB) que en dos ocasiones llevó a Rubén Costas, primero a la Prefectura y luego a la Gobernación.
“Lo que pasa es que hay un bando que ahora se asoció con el MAS y están impulsando el juicio”, advirtió Juan Carlos Becerra, actual jefe departamental de APB.
Por eso un enjambre de periodistas estuvieron en una audiencia en la que el gobernador Costas declaró ante el juez Gonzales señalando que si bien es cierto conocía a uno de los supuestos dueños de la sigla, Juan Carlos Guzmán, no le reconoció la jefatura. Asimismo declaró Marcos Monasterio, el secretario de cámara de la Corte Departamental Electoral.
“Esto es show político”, dijo Becerra y acusó a Gonzales de pedir $us 100 mil por la sigla, y Guzmán admitió el hecho y denunció que lo dejaron fuera del poder. Y Costas declaró y se fue a su despacho a hablar de fútbol y de la sequía.
Dice que gana menos que Evo
El gobernador Rubén Costas dijo “estoy dentro de la ley” cuando una periodista de la Red Patria Nueva le preguntó ayer si bajaría su salario como propuso el presidente Evo Morales.
Poco después dijo que aunque no debería revelarlo, percibe un salario aproximado de 14 mil bolivianos, que sin embargo utiliza “en fines altruistas” pues sus ingresos como agricultor cubren sus necesidades.
Costas se abstuvo de referirse con juicios de valor al porqué el Gobierno de Morales está donando tres mil toneladas de arroz a Cuba, sin embargo dijo que en el caso de Santa Cruz se están preocupando por recolectar forraje, agua y alimentos para trasladarlos a la región del Chaco, que actualmente sufre una de las peores sequías.
Nota : Ernesto Justiniano
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