Los rojos no pudieron “tumbar” al líder del campeonato Clausura y dejaron escapar una valiosa oportunidad para alejarse de la zona del descenso y ahora debe pensar en el partido que disputará con Wilstermann en Cochabamba otro de los equipos que está en la peligrosa zona del descenso.
Guabirá decepcionó a su hinchada, que como en ninguno de los anteriores compromisos, asistió en gran cantidad al estadio Gilberto Parada para respaldar a los locales; sin embargo salieron con sabor a poco pues los azucareros fueron incapaces a la hora de vulnerar el arco contrario. Es decir no supieron aprovechar las incontables oportunidades que le brindó el rival de turno que hizo su trabajo y arrancó un punto de oro que le permite estar en la cima del Clausura.
Los resultados de algunos partidos de la séptima fecha favorecieron a los rojos, pero fueron ellos lo que no jugaron a su favor y terminaron cediendo dos importantes puntos que seguramente pesaran en lo posterior. Wilterman perdió 2 -1 frente a Strongest; Bolívar goleó a La Paz FC por 3 – 1 y finalmente Aurora dio cuenta de Real Mamoré al someterlo por 3 a 0 equipos que están junto a Guabirá en la complicada zona del descenso.
El DT Claudio Chacior presentó un esquema muy diferente al planteado frente a San José al que sometió por 3 a 1. Muchos de los jugadores como Álvaro Paniagua, totalmente desconcentrado; Freddy Chispas muy enamorado del balón que retardaba el ritmo del partido; Richard Uriona y Ronald Gutiérrez, que confundieron en gran parte del partido el campo de juego con una plaza por donde siempre caminaron y finalmente Pedro Velásquez apodado el “Torogol” que por no concretar las oportunidades que ha tenido pide a gritos que se le llame ahora “Pelagol”.
Sin embargo es el técnico el que siempre tiene la razón y arma el equipo con algunos jugadores que deberían dedicarse a otra cosa menos al fútbol o ser más hidalgos con ellos mismos y dejar el fútbol antes que el fútbol los deje a ellos. Pero no todo es malo en Guabirá hay que reconocer la entrega de algunos jugadores como Sergio Galarza, Delio Ojeda, Claudio Centurión y Bruno Juárez que en la mayoría de los partidos se convierten en verdaderos gladiadores para defender el equipo.
Blooming también tuvo oportunidades que no supo concretar pero eso amerita un análisis aparte, aquí lo cierto es que los azucareros defraudaron una vez más esa gran hinchada que siempre los apoya en las buenas y en las malas, o sino que alguien me diga porqué la telemaratón tuvo muy buena respuesta, así como el domingo en el estadio no cabía una sola aguja... O será acaso que su presidente Gerardo Rosado ha logrado catalizar la animadversión que muchos le tienen en metal para favorecer al club.
Mucha gente esperaba por lo menos una victoria de los azucareros para responder a ese cariño y apoyo que le brinda la gente de Montero y el Norte Cruceño, pero no fue así, el domingo cayó el trillado mito que Guabirá jugando de local es imbatible o es que simplemente el aleteo de la gallina (así le llaman a Blooming) fue muy fuerte que apagó el fuego de la “Caldera”.
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