Los pueblos indígenas del Beni, departamento declarado en emergencia, dicen que no recibieron ayuda por los incendios y sequías. Más de 600 familias de 10 comunidades perdieron sus cultivos, animales de corral y hasta sus precarias casas. Advierten de que la recuperación será lenta y el impacto en la economía familiar, devastador.
El presidente de la Central de Pueblos Étnicos Mojeños de Beni (CPEMB), Ernesto Sánchez, declaró a Cambio: “Ninguna autoridad departamental de la Gobernación, ni del Gobierno central con Defensa Civil se ha preocupado por las comunidades que se han quemado y que se han quedado sin nada tras la sequía”.
Contó que las comunidades afectadas, en su desesperación, se contactaron con el diputado Pedro Nuni (MAS), para que interceda por sus hermanos benianos.
Sánchez informó que en una primera cuantificación de las zonas afectadas se evidenció que más de 600 familias de 10 comunidades perdieron todo, por lo que requieren con urgencia semillas y alimentos con el fin de mitigar el hambre. Indicó que por las zonas visitadas no llegó ningún producto para solucionar las grandes necesidades de los benianos. Entre los más afectados citó al Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), el Territorio Indígena Multiétnico (TIM) y el Territorio Indígena Mojeño Ignaciano (TIMI).
La provincia Cercado, las subcentrales Desengaño, Bella Selva, San Lorenzo y San Francisco de Moxos, según la CPEMB, son las más afectadas. “La situación es realmente dramática, nuestros hermanos comunarios no tienen nada, porque lo que han producido lo perdieron por las sequías o porque el fuego alcanzó sus cultivos”, aseguró.
Anunció que la recuperación será lenta, pues la producción de yuca tarda seis meses; el maíz, cinco meses, y el plátano, un año.
“Hemos tenido dos extremos: la inundación que se tuvo desde el año pasado y ahora la sequía. Hasta los chocolatales se han secado porque el fuego entró en los montes”, dijo.
La secretaria de Organización de la Central de Mujeres de Pueblos Indígenas de Beni, Melva Hurtado, afirmó a este medio que a pesar de que las comunidades se declararon en estado de emergencia por los incendios y sequías, no recibieron respuesta de ninguna autoridad.
“Por donde pasamos no estuvo Defensa Civil, ahora sólo nos queda esperar las gestiones de la CIDOB (Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente Boliviano)”, afirmó.
PARA DESTACAR
Afectación estimada: más de 600 familias de 10 comunidades de Beni.
Territorios afectados: Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), Territorio Indígena Multiétnico (TIM) y el Territorio Indígena Mojeño Ignaciano (TIMI).
Comunidades: provincia Cercado, las subcentrales Desengaño, Bella Selva, San Lorenzo y San Francisco de Moxos.
Pérdidas agrícolas: cultivos de maíz, yuca, plátano y de cacao fueron dañados por el fuego o la sequía.
Consecuencia: los comunarios prefieren quedarse en sus comunidades para luchar contra la adversidad climática. No confían en encontrar trabajo en las ciudades.
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