En recordación a los doscientos años de la Batalla de Aroma, ocurrida el 14 de noviembre de 1810, cuando las tropas altoperuanas obtuvieron su primera victoria sobre los españoles, fecha considerada como el origen de la actividad militar boliviana, unos 800 soldados y 150 instructores oficiales participaron ayer en los actos conmemorativos del Bicentenario del Ejército de Bolivia, que fueron desarrollados desde las nueve de la mañana en el estadio IV Centenario.
El homenaje fue realizado ante unos tres mil espectadores, quienes presenciaron los desfiles de los seis regimientos acantonados del departamento, cuyas órdenes venían directamente del presidente Evo Morales y el comandante general del Ejército, Antonio Cueto, desde la ciudad de La Paz, que eran reproducidas en una pantalla de televisión instalada en el estadio. Los regimientos presentes fueron el Padilla y Chorolque de Tarija, Aroma y Escuela de Cóndores de Yacuiba, Campero y Pisagua de Villa Montes.
En su discurso de conmemoración, Morales destacó la labor de las Fuerzas Armadas en la lucha contra el contrabando y contra el narcotráfico, y resaltó la asistencia a la población de las zonas fronterizas, el apoyo en el pago del bono Juancito Pinto y la Renta Dignidad, además de la colaboración en la atención a los damnificados en los desastres naturales.
“Las Fuerzas Armadas son de gran importancia para el país porque, en menos de cinco años, el desarrollo de Bolivia no sólo es una esperanza para el pueblo, si no una esperanza, junto a otros países, de toda la humanidad”, expresó.
En su discurso de conmemoración, Morales destacó la labor de las Fuerzas Armadas en la lucha contra el contrabando y contra el narcotráfico, y resaltó la asistencia a la población de las zonas fronterizas, el apoyo en el pago del bono Juancito Pinto y la Renta Dignidad, además de la colaboración en la atención a los damnificados en los desastres naturales.
“Las Fuerzas Armadas son de gran importancia para el país porque, en menos de cinco años, el desarrollo de Bolivia no sólo es una esperanza para el pueblo, si no una esperanza, junto a otros países, de toda la humanidad”, expresó.
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