Las riadas provocan emergencia nacional

Desastre. En Rurrenabaque reportaron dos muertes y las aguas del río Beni llegaron hasta su plaza. Se aprueban $us 20 millones como ayuda

Daño. Parte del pavimento de la carretera a Cochabamba terminó devorada por las aguas, lo que causó la interrupción del tránsito por esa vía. La ABC identificó 13 tramos no transitables en el país

Las persistentes lluvias y el desborde de varios ríos en el territorio nacional, según da cuenta el reporte de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), dejan un saldo de 13 tramos intransitables, en seis departamentos, de la Red Vial Fundamental (RVF).
A decir del responsable de Prevención de Desastres de la ABC, Marco Ayala, los tramos  que se hallan cerrados al tráfico vehicular por las lluvias y desbordes de ríos corresponden a Tarija, Oruro, Santa Cruz, Cochabamba, La Paz y Beni.

En Beni, según Ayala, se cerraron los tramos Palmaflor-El Toro, Reyes-Rurrenabaque, San Ignacio de Moxos-Trinidad y San Javier-San Ramón, debido a la saturación de la plataforma y a la crecida del río Tijamuchí.

En La Paz, las rutas que se encuentran intransitables son Irupana-Inquisivi por la crecida del río Checa, Unduavi-Chulumani por el aumento del caudal del río Unduavi y Escoma-Apolo, Caranavi-Guanay, Caranavi-Quiquibey y Abrapolea-Licoma también por este fenómeno.
En Oruro, el recorrido que vincula a Nuevo Porvenir con Cosapa está cerrado por la crecida del río Cosapa; en Tarija, el tramo Canto del Agua-Choere se cerró, a decir de Ayala, por derrumbes y crecida del río Choere.

Ayala refirió que la carretera nueva Cochabamba-Santa Cruz se encuentra cerrada a causa de la crecida del río Espíritu Santo que afectó al puente del mismo nombre en el kilómetro 132 de la ciudad del valle. Manifestó que cuando disminuya el caudal del río se evaluará el estado del puente para permitir la circulación vehicular. 

En el caso de la carretera antigua Cochabamba-Santa Cruz, detalló que se encuentra transitable con precaución por el riesgo constante de deslizamientos de rocas y tierra. Recomendó máxima cautela a los conductores y en lo posible viajar durante el día. “En el resto de la RVF se están realizando trabajos de conservación, prevención y emergencias. La ABC destinó para los trabajos Bs 40 millones y se contrataron 50 empresas constructoras”, puntualizó Ayala.  

En el caso de Santa Cruz, el informe de la ABC señala que los ramales Ipitá-Vallegrande y El Yeso-Río Grande se encuentran cerrados por la crecida de los ríos Masicurí, Ñancahuasú y Río Grande.

El jefe regional de la ABC, Santa Cruz, Adhemar Rocabado, refirió que la carretera nueva a Cochabamba está cerrada debido a que las persistentes lluvias que se presentan en Chapare dañaron la plataforma en algunos puntos y deterioraron parte de la estructura del puente Espíritu Santo.
Sobre la carretera antigua a Cochabamba, Rocabado refirió que está transitable con cautela debido a los constantes derrumbes de rocas de los cerros, por lo que recomendó precaución a los  transportistas.

En un recorrido que se hizo anoche por la terminal Bimodal se verificó que algunos buses de transporte interdepartamental salieron a Cochabamba por la ruta antigua. Se advirtió poco movimiento y los agentes de venta indicaron que cayó la demanda de pasajes.
En el ámbito productivo, según Anapo, el rebalse del Río Grande anegó 4.000 hectáreas de soya y 400 de maíz en Limoncito. Hay también cultivos de arroz y sorgo afectados.
Carreteras provinciales con dañosUnos 10 metros de la base de la ruta Santa Cruz-Yacuiba, en la zona de Las Piedritas, a 6 kilómetros de Camiri, han colapsado aunque la plataforma se mantiene. Se constató el desmoronamiento de la base, lo que hace que la carretera se encuentre literalmente ‘colgando’ en el aire.
El subgobernador de la provincia Cordillera, Richard Moreno, señaló que recibió el dato y lo pasó al director de la ABC Santa Cruz.
También hay riesgos en Isiri, en la zona de Itiyuro, a la altura de la Muela del Diablo, donde el agua cubre la calzada y una parte de la capa asfáltica se ha desmoronado. “Lamentablemente los trámites para la inmediata atención resultan muy burocráticos”, se quejó el subgobernador.
El tramo Concepción-San Ignacio de Velasco está en pésimas condiciones por las torrenciales lluvias. Según el informe de los choferes de medios de transporte interprovincial entre la capital cruceña y San Ignacio, se tarda más de 17 horas, cuando lo normal es ocho horas.






Nota: El Deber