Cochabamba - Bolivia.- Los obispos de los nueve departamentos reunidos en Cochabamba, hace una semana, expresaron su profunda preocupación por la coyuntura actual que vive el país, con relación a diferentes problemas y necesidades, entre ellos la elección de las nuevas autoridades del Poder Judicial.
En el marco de la conclusión de la XCI Asamblea Plenaria de la Comisión Episcopal de Bolivia (CEP), a través de una carta pastoral, el vicepresidente de la CEB, Monseñor Jesús Pérez, expresó su gran preocupación por la situación política, económica y social que vive el país, entre ellos, la elección de las nuevas autoridades del Poder Judicial.
“La elección de los jueces del Tribunal Supremo de Justicia es una oportunidad, para el ejercicio de la democracia. Este proceso exige que los ciudadanos tengan un conocimiento suficiente de los candidatos y su idoneidad y honestidad, para poder optar con libertad y conciencia, en el marco de las reglas justas y transparentes”, manifestó Pérez.
En encuentro que duró siete días permitió también a los obispos de todo el país realizar un análisis de la realidad educativa en Bolivia, con la implementación de la Ley Abelino Siñani.
“El tema educativo sigue siendo prioritario en nuestro país, si queremos salir de la situación de pobreza y marginación (…) la educación es responsabilidad de todos, no sólo de Estado, especialmente de las familias y de la sociedad civil. Es propio de Estados no democráticos usurpar a la sociedad el derecho a participar en la tarea educativa”, aseveró.
Asimismo, la Carta Pastoral expresa la preocupación de la Iglesia Católica por las migraciones que afectan a miles de familias en Bolivia.
“Nos preocupa la presencia de las migraciones que siguen afectando a las familias bolivianas, especialmente en las zonas rurales y marginales; aunque aportan beneficios económicos a una parte de la población, sin embargo, en muchos casos provocan la desintegración familiar y la pérdida de la identidad cultural y social”, enfatizó.
Por otra parte, en el mensaje de clausura, también se advirtió la inseguridad ciudadana, que existe en el país, situación que también preocupa a la Iglesia Católica, con graves consecuencias para la paz y la justicia social.
“Hay un sentimiento generalizado de inseguridad ciudadana por el crecimiento desmesurado de la violencia contra las personas, que llega al extremo de quitar la vida. Se ha perdido el sentido sagrado a la vida, debido a una mentalidad relativista, sin valores humanos y cristianos, ni principios éticos ni morales”, advirtió.
El mensaje de clausura también hizo referencia a la contaminación ambiental, el respeto a la vida y rechazo total al aborto, además del matrimonio religioso, asimismo, en la parte final se saludó a los periodistas recociendo su labor comprometida por informar a la sociedad.
“Felicitamos a los periodistas y a todos los trabajadores de la prensa en su día, conocemos su problemática y sus dificultades que encuentran en el ejercicio de su profesión. Les animamos a seguir en su indispensable servicio a la sociedad, guiados por la búsqueda de la verdad y el bien”, concluyeron.
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