La COB en el proceso político y social

ORIENTACIóN. LA COB PUEDE SER MECANISMO DE CONTRAPESO, QUE ADEMáS DE SU LUCHA DE REIVINDICACIóN SOCIAL, ORIENTE IDEOLóGICAMENTE COMO LO HIZO EN SUS INICIOS CON DOCUMENTOS Y DECLARACIONES.

La Central Obrera Boliviana ha tenido durante las últimas semanas un rol protagónico que la ha levantado de una especie de letargo al que había ingresado durante los últimos años en términos de luchas de reivindicación social en favor de los trabajadores.

Las movilizaciones en favor de un mejor aumento salarial le han permitido recobrar su protagonismo sindical pero al mismo tiempo han marcado una distancia entre el Gobierno y el movimiento laboral que durante los últimos años daba muestra de una especie de condescendencia en relación a las políticas gubernamentales. Los trabajadores del país han expresado sin embargo, que no están en contra del proceso de cambio y por el contrario lo impulsan pero las críticas sobre políticas concretas del Ejecutivo como en el asunto de los salarios han derivado en un movimiento que ha dejado clara la situación en relación a su no subordinación.

Los resultados de las luchas sociales en las calles y los bloqueos con motivo del incremento de salarios han sido mínimos y esto reconocen los dirigentes cobistas, pero también están conscientes que el reciente movimiento obrero les ha permitido recobrar fuerza e independencia frente al Gobierno y otros sectores del oficialismo.

En un reciente congreso de la COB en Tarija, los trabajadores se pronunciaron por llevar adelante su lucha sindical y de mejores condiciones de vida, agregando una áspera crítica contra el vicepresidente García Linera y avanzando incluso más al anunciar que pedirán su revocatoria de mandato aun sabiendo que este procedimiento constitucional es complicado y que no se aplica porque faltan requisitos reglamentarios. Sin embargo es una advertencia que establece con claridad el distanciamiento entre Gobierno y trabajadores y la línea sindical obrera que seguirá este organismo con sus actuales dirigentes o con los electos en unas próximas elecciones.

La COB ha marcado hitos importantes en la historia de Bolivia y su fuerza sindical siempre ha estado en el gran número de afiliados y en esa equidistancia que ha mantenido respecto a los poderes políticos y económicos. Desde su fundación el 17 de abril de 1952 en el marco de la revolución de 1952 sobre la base de los sindicatos mineros que se organizaron en la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB) liderada por el legendario Juan Lechín Oquendo, banderizó la generalidad de las luchas sindicales, pero además, actuó como factor de presión sobre los partidos políticos en función de gobierno y sobre el gobierno mismo. Esta organización sindical casi nunca ha tenido relaciones fáciles con los gobiernos y su influencia en muchas oportunidades incluso ayudó a derrocar gobiernos. Su lucha durante los gobiernos de la dictadura militar ha sido de enorme importancia desde la clandestinidad y de forma abierta, incluso costó la muerte de varios dirigentes. Ha sobrevivido en el tiempo por su unidad ante los intentos de dividirla en un ejercicio al que ha sido sometida por diferentes gobiernos.

Actualmente la Central Obrera puede constituirse en un mecanismo de contrapeso y de equilibrio frente a un escenario donde la oposición política es débil. Una organización que sin embargo esté libre del sectarismo político y que oriente ideológicamente al país.

No se puede olvidar que su primer documento de alto contenido ideológico proclamaba la lucha por la nacionalización de las minas, los ferrocarriles y la reforma agraria, declaraba la independencia política de la COB a nivel nacional e internacional y pedía al gobierno la derogación de las leyes antiobreras.

Nota : Opinion