Los ancianos recurren a las clínicas

Muchos adultos mayores que llevan días sin recibir hemodiálisis debido a que la Caja Nacional de Salud decidió no seguir prestando el seguro de vejez han empezado a sentirse bastante delicados, por lo que han tenido que ser llevados de emergencia a centros privados por sus familiares.
Piedades Subirana (61), la noche del jueves sufrió una descompensación mientras aguardaba solución al problema de la falta del prestador de servicio en la oficina municipal, ubicada en la calle Cuéllar. De inmediato sus familiares la llevaron a la clínica Ribui, donde pagó Bs 350 para recibir diálisis.
Lo mismo sucedió con Rogelia Daza (65), que llevaba ocho días sin someterse a este tratamiento. “El jueves se puso muy mal, su cuerpo estaba hinchado y empezó a convulsionar. Tuvimos que recurrir a la clínica Ribui, pues de lo contrario mi madre habría muerto”, comentó su hijo, Vidal Vega.
Vega, junto a varias personas, llegó ayer hasta las oficinas de la Oficialía Mayor de Desarrollo Humano para exigir que la Alcaldía les dé una solución, ya que no tiene recursos para pagar por una nueva sesión. Los adultos mayores con problemas renales deben recibir, por lo menos, dos hemodiálisis por semana para poder vivir.
Allí, un funcionario municipal les informó de que los que están más graves pueden ir a un centro privado, pero deben comprar los insumos.
La alternativa fue rechazada por la mayoría de los afectados porque, según sus cálculos, por los insumos deben pagar Bs 500. “De dónde vamos a sacar ese dinero. Exigimos que la comuna cubra el costo de los insumos porque la ley dice que la atención para los mayores de 60 años es gratuita”, manifestó Rubén Pedraza, dirigente del sector.
La oficial mayor Ana María Encina dijo que esa es la solución momentánea que ofrece la Alcaldía hasta que se llegue a un acuerdo con un centro privado o se resuelva el problema con la CNS.
Según Encina, desde el jueves cinco asegurados han recibido tratamiento de diálisis en un centro privado. Hoy lo harán otros ocho.
Ayer, la ministra de Salud, Nila Heredia, que estuvo en Santa Cruz participando de un taller, sostuvo que la comuna debe buscar una solución al problema.
El paro perjudica las atenciones
Pese a que tenían dinero para pagar la consulta, ayer varias personas de la tercera edad, igual que otros pacientes que fueron al Japonés, no fueron atendidos porque los trabajadores del nosocomio estaban en paro.
Cleotilde Ortiz, de 63 años, que tenía fiebre, tuvo que irse a un centro privado.
Los trabajadores del Japonés declararon un paro de actividades, por 24 horas, en protesta porque la Alcaldía no les había cancelado el sueldo de abril. Por la tarde, en la comuna informaron de que el problema estaba siendo solucionado.
En el San Juan de Dios, los del seguro de vejez seguían pagando para recibir asistencia médica.  

Nota : El Deber