EDUARDO NORIEGA SE CONVIERTE EN EL HOMBRE MÁS BUSCADO DE BOLIVIA

Foto: JOSEFINA BLANCO/EP Ampliar foto

AL MÁS PURO ESTILO WESTERN EN SU ÚLTIMA PELÍCULA

MADRID, 4 Jul. (Por Julia Fernández)

Se calza las espuelas, se pone un sombrero y se sube a un caballo al más puro estilo western. Es el nuevo forajido más buscado, el hombre más peligroso de Bolivia y el nuevo inseparable del legendario Butch Cassidy.

   Esta es la última película del Oeste, una novedad y un temerario desafío ya que hace un sincero homenaje al puro western norteamericano dirigido por el canario Mateo Gil, amigo íntimo del actor y protagonizado por europeos.

   Blackthorn, sin destino es la última película del cántabro en la que se mueve como pez en el agua, manejando pistolas y un fluido inglés que deja con la boca abierta. El actor vive una nueva etapa, estrenando un género al que nunca se había enfrentado antes y también vida personal.

   Noriega presume ahora de casado desde febrero de este año. Contrajo matrimonio con su novia Trinidad Oteros, con la que mantiene una relación desde hace seis años, Ha sido una boda sencilla y discreta, al más puro estilo del guapo actor.

- Ha sido un rodaje bastante duro, ya que habéis grabado en Bolivia...

- Ha sido duro por las condiciones, pero yo no lo he sentido en ningún momento. Evidentemente grabar a 4.500 metros de altura es complicado porque te falta el aire, la condición física afecta, pero sobre todo afecta a la producción: mover a ochenta personas donde no hay infraestructuras, movilizar animales, caballos... Yo he vivido este rodaje como una aventura, con la ilusión de hacer la película que estaba haciendo. Para mí es un sueño rodar con Mateo Gil, es un sueño que te ofrezcan un western, un personaje tan interesante, y además hacerlo con Butch Cassidy o conStephen Rea. Yo no sentía la dureza en ningún momento, he vivido una aventura que voy a recordar muchos años de mi vida.

- ¿Cómo ha ido el tema de las pistolas, montar a caballo todo el rato y convertirte en un verdadero forajido?

- Tuve un entrenamiento específico, estuve aquí en Madrid montando a caballo diariamente antes de irme y allí no me bajé del caballo durante tres meses. Ya había montado antes para otra película, pero no me enseñaron muy bien. Para esta película sí me he preparado a consciencia. Además, de pequeño tampoco monté nunca a caballo, no soy nada caballista. En Bolivia no me bajaba del caballo, en las pausas de rodaje me escapaba con el caballo montaña arriba con un wolki y estaba totalmente asilvestrado, fundido con el paisaje. De hecho, al final, acabé con heridas de tanto montar.

- En la película casi todo los diálogos son en inglés, ¿ha sido un desafía para ti rodar en otro idioma?

- He rodado unas cuantas películas en inglés antes de esta. Llevo diez años trabajando con mi couch, y estuve meses en Madrid previos al rodaje trabajando el inglés. Me encanta rodar en otros idiomas.

- Sam Shepard, que encarna a Butch Cassidy, hace sus pinitos con el español en la película, ¿le ayudaste tú?

- Intentaba ayudarle. La verdad es que esperábamos que hablara un poco más de lo que hablaba porque su padre fue profesor de español y pensábamos que tendría facilidad. Pero la verdad es que estaba un poco verde, de hecho se le entiende poco. A veces, incluso, Sam pretendía improvisar con el español y yo intentaba que se centrara en sus frases, que no las decía muy bien.

- Blackthorn es una película sobre la amistad. El director, Mateo Gil, y tú lleváis siendo amigos muchos años...

- Creo que si emociona y gusta la película es porque habla de cosas sencillas pero importantes. Mateo y yo nos conocimos hace diecinueve años. Yo estaba estudiando Arte Dramático y él estudiaba Imagen y Sonido junto con Alejandro Amenabar. Coincidimos en aquella época y, aunque eramos unos jóvenes inexpertos, hacíamos cortos y nos lo tomábamos muy enserio. Por suerte luego hemos podido trabajar juntos profesionalmente y yo he podido trabajar con dos personas con mucho talento y mucha capacidad de trabajo. Que sigan contando conmigo me llena de orgullo, como hace dos años en la película de El mal ajeno deAlejandro Amenabar o este año con esta. Me siento un afortunado.

- Esta película supone una novedad, ya que el western es un género tradicionalmente norteamericano y sin embargo está rodada por actores europeos y el director es español, ¿crees que va a gustar al público norteamericano y que te servirá como trampolín para desarrollar tu carrera en Hollywood?

- Que se estrene una película española en Estados Unidos ya es un éxito porque hay muy pocas películas españolas que lleguen a estrenarse allí, al contrario de lo que ocurre en España, que se estrenan muchas películas americanas. Que la película fuera seleccionada por el Festival de Tribeca dice mucho de ella porque es un género puramente norteamericano y ellos lo aceptaron como suya. Tuvo muy buena crítica de público en Estados Unidos y además se estrena en octubre. Yo creo que será todo un éxito. Por otro lado, participar en esta película me viene muy bien, que se estrene en Estados Unidos es importante para mí como actor español. Pero tampoco creo que a partir de esta película me lluevan las ofertas para hacer películas en Hollywood, aunque ojalá. Sin embargo, no quiero hacer cualquier película porque venga de Hollywood, encontraré el proyecto que me interese. No quiero hacer un película que no haría en España sólo por venir de Estados Unidos.

- Hay una imagen en la película que muestra la gran capacidad tuya para reírte de ti mismo cuando bromeas sobre tu trasero...

- Eso estaba en guión. Hay una anécdota con esa secuencia. Después de montar en un caballo, efectivamente te acaba haciendo heridas y esa imagen muestra como en una situación en la que no hay nada ni nadie,Butch Cassidy debe ayudar a su amigo Eduardo. Debe bajarle los pantalones y echarle un ungüento en la herida que se ha hecho en el trasero, sin embargo Sam Shepard no se atrevía a tocarme. En el guión decía que había que frotar la herida, pero Sam lo que hacía era lanzarme el ungüento. Decía que él tenía una reputación, que a él en Estados Unidos le conocen. Finalmente en montaje se ha duplicado esa imagen para que el movimiento que hace Sam parezca efectivamente que está frotando para curarme.

- Tú eres un actor considerado guapo y sexy, ¿cómo asumes esta condición? ¿te gusta que te lo digan?

- A nadie le amarga un dulce, siempre está bien que me digan un piropo. Pero en cuanto trabajo no busco papeles que digan "hombre guapo y sexy" para interpretarlos y lucirme. Lo que intento es hacer bien mi trabajo, crecer como actor y aportar cosas a las películas. A lo que aspiro es a ser un buen actor, no ha que me consideren más o menos guapo.

- ¿Qué proyectos futuros tienes en mente?

- Espero empezar a rodar el año que viene con Santiago Tabernero. Se trata de un guión que hemos escrito a cuatro manos adaptando una novela de Clara Sánchez, Presentimientos. Espero que en cuanto tenga un hueco podamos empezar a grabarla. También estoy grabando un serie ahora mismo, Homicidios, que se estrena en septiembre.

- ¿Ahora también escribes guiones?

- Ha sido una experiencia un poco temeraria, porque no es lo mio y me parece una gran responsabilidad. Ha sido un trabajo muy enriquecedor y muy fructífero. Estoy muy contento con la experiencia y ojalá podamos rodar el año que viene.

- También estás trabajando en un proyecto bastante novedoso, laTwitMovie

- Se trata de buscar gente voluntaria para hacer una película a coste cero a través de la red social Twitter. Además, si se consiguen beneficios irán para una ONG. Es una especie de locura que se está haciendo realidad.

Nota : Europa Press