Niñas quemadas luchan por su vida

Las dos hermanitas que dormían solas y sobrevivieron al incendio de su casa en Sacaba, la noche del martes, se aferran a la vida pese a la gravedad de sus heridas provocadas por el fuego que comenzó con la vela que usaban para alumbrar su cuarto, mientras sus padres consumían bebidas alcohólicas.
El caso más grave es de Rosemary Jara Arancibia (4), que sufre de dolor, tiene el 70 por ciento del cuerpo quemado y requiere de la solidaridad de los cochabambinos para contar con medicinas y afrontar la larga recuperación que le espera si supera la fase crítica.
El medico que la atiende y jefe de la unidad de Quemados del hospital del niño Manuel Ascencio Villarroel, Óscar Romero, explicó que la niña ardió en llamas, por ello tiene más de la mitad del cuerpo con quemaduras de tercer grado, consideradas las más graves por la profundidad de las lesiones.
La hermana de Rosemary, Wilma Jara Arancibia (6), también está hospitalizada: tiene quemados los brazos.
Los padres de las niñas aparecieron después de la desgracia y fueron llevados a la Brigada de Protección a la Familia, donde se despabilaban de la borrachera, para ir a ver a sus hijas.

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