Es la frase que se utiliza a menudo para referirnos a que todo marcha bien. Pero en nuestro municipio ¿Todo marcha bien? Esa es una interrogante que las autoridades municipales de turno deben responder.
Azul, Azul. No, no se trata del afamado grupo cruceño que está en la fase final de su carrera. Se trata de la visión que tiene la actual administración municipal que lidera el ex dirigente vecinal y ahora circunstancial alcalde, Mario Baptista. Una autoridad que aparentemente sufre Daltonismo, porque todo lo ve azul. Incluso los problemas cotidianos de la ciudad.
El señor Alcalde y sus colaboradores está afanados en pintar la ciudad del color azul, o mejor dicho los predios municipales, para hacernos creer que todo marcha bien, que no hay problemas en la ciudad o quizás para tejer una cortina de humo para disimular lo que será su nuevo dolor de cabeza, el abusivo y discriminador aumento salarial del más del 25 por ciento.
Incremento que impuso en la Programación Anual Operativa del 2012 con el apoyo de su bancada, un puñado leal de concejales, que ya se frotan las manos para recibir el emolumento. Sí, los señores y señoras que fueron elegidos para defender los intereses de la ciudadanía. Si esa es la mejor forma que tienen para defender los intereses de la población, es preferible defenderse solos.
De este abuso canalla y artero, que insulta la inteligencia del pueblo, son cómplices aunque no hayan aprobado el documento los concejales de la oposición. Son ellos los que en su momento debieron denunciar esta anomalía. Culpa también tiene el “Control Social” que se dejó engatusar con el ejecutivo municipal y ahora llora sobre la leche derramada.
Este es uno de los tantos argumentos por los que el señor Mario Baptista quiere una ciudad azul. Y para ello ya comenzó pintando la barda de un colegio en el centro de la ciudad; ahora continúa su labor con los muros de la barda del colegio Libertad, siguiendo con la cancha de la unidad educativa Franz Tamayo, para citar algunos ejemplos.
Pareciera ser que a nuestro Alcalde le va mejor de pintor, que como administrador de la cosa pública, porque a vista y paciencia de todos está dando sus brochazos, nos quiere meter el color azul a moros y cristianos a negros y a blancos. Promociona su color en paredes de escuelas públicas. ¿Dónde la oposición? ¿Dónde está el Control Social? ¿Por qué callan?
Que satisfacción daría ver a nuestra autoridad municipal dar brochazos para pintar felicidad en los rostros de los estudiantes que sufrieron indigesta por el alimento complementario. Pintar alegría en los semblantes de los preocupados padres de familia de los educandos que tuvieron que meter la mano al bolsillo porque el Seguro Estudiantil carece de medicamentos. Al igual que el sistema de salud.
Pintar las arrugas de nuestros abuelitos para aliviar sus dolencias con una oportuna atención médica. Señor Alcalde pinte, pero pinte la seguridad de los tinglados que cayeron como castillos de naipe como consecuencia de los vientos. Siga dando brochazos por una buena seguridad ciudadana. Utilice las cerdas de su brocha para limpias las dudas que dejó el proceso de compra de sus famosas “pelotas truchas” que destapó todo tipo de sospechas. Pinte una mejor calidad de vida para los vecinos de algunos barrios de la ciudad agobiados por la contaminación ambiental de algunas empresas que están en el área urbana, que se dice muy cercano a usted y su color azul.
Si embargo, de algo estoy seguro, el famoso color azul, que también utiliza como imagen corporativa una empresa telefónica, no hará como usted pretende, que los montereños olvidemos ese y otros desaciertos.
Su estrategia de posicionamiento azul, puede funcionarle; pero también tiene sus consecuencias sobre todo cuando el producto o el servicio no llenan las expectativas del público objetivo al que se intenta cautivar. Por eso fracasan algunas campañas de propaganda y publicidad. Y en este caso el color en vez de gustar al público, puede llegar a aborrecerlo.
Finalmente su empeño me recuerda a un nefasto personaje y su clan, que marcaron la historia de la humanidad con las famosas letras “S” entrelazadas. Quizá usted también lo recuerde y si no es así, es porque todo lo ve azul.Nota : Montero Noticias
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