La ciudadanía paceña vivió ayer una jornada tensa, tras la llegada de la marcha “evista” al Tribunal Supremo Electoral (TSE). La movilización generó caos y violencia que dejó el saldo de cinco heridos y 23 aprehendidos, entre ellos el dirigente campesino Ponciano S. Colque, con la ejecución de una orden que pesaba en su contra.
La movilización llegó a la ciudad de La Paz después del mediodía y a la plaza Abaroa en horas de la tarde, donde rompió los anillos de seguridad e inició los enfrentamientos con provocaciones a los uniformados, a quienes los manifestantes lanzaron piedras, petardos y otros objetos contundentes.
Ante estos hechos, las fuerzas del orden se vieron obligados a responder con el uso de agentes químicos contra los manifestantes en el lugar, quienes comenzaron a dispersarse por las calles adyacentes en el transcurso de la tarde. Aunque el Gobierno propuso que una delegación de cinco personas ingrese al recinto para inscribir al cocalero, los marchistas optaron por la violencia y Morales no logró ser inscrito.
Tras el operativo policial, los dirigentes del sector “evista” ordenaron el repliegue de sus bases hasta el trópico de Cochabamba, anunciando un ampliado para el domingo por la mañana en Lauca Ñ, bastión sindical y cocalero del expresidente Morales.
Por otro lado, el dirigente “evista” Ponciano Santos fue aprehendido por la Policía en horas de la tarde de ayer durante la movilización de los sectores sociales en cercanías de la plaza Abaroa, ubicada en la zona de Sopocachi de La Paz, por un caso relacionado en la organización de los 24 días de bloqueo en Cochabamba con el resto del país.
Entretanto, los sectores afines a Evo Morales iniciaron ayer bloqueos de caminos en la ruta que conectan a Cochabamba con Santa Cruz atravesando el Chapare, como medida de presión contra el Gobierno central.
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