Las acusaciones del Órgano Ejecutivo contra la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) continúan, sin embargo, éste aún no toma la decisión de expulsar del país a ese organismo y mantiene una negociación con funcionarios del país del Norte para la firma de un Acuerdo Marco que garantiza una cooperación anual de $u 75 millones.
Al respecto, la analista Jimena Costa mencionó que el Gobierno actúa con “doble moral” ante la cooperación de USAID, debido a que inicialmente expulsa a la entidad estadounidense y luego acepta nuevamente su estadía en Bolivia.
Costa mencionó que autoridades como el canciller David Choquehuanca, el ministro de Autonomías, Carlos Romero, el ex ministro Alfredo Rada, entre otros, que estudiaron en la Organización No Gubernamental del CEJIS, ahora reciben la cooperación del organismo.
BUSCAN COOPERACIÓN
Asimismo, mencionó que organizaciones indígenas como la CIDOB, pueblos indígenas que se encuentran adoptando medidas de presión contra el Gobierno, reclaman ahora la cooperación del organismo internacional debido a que el Gobierno habría engañó a los sectores sociales.
Según la experta, la huelga de hambre y la marcha enarbolada por la CIDOB, que pide autonomía y reversión de tierras, se producen debido al descontento de estos sectores que no encuentran una solución a una demanda de autodeterminación consignada en la Constitución Política del Estado.
“El descontento se da como efecto de que el Gobierno del MAS prometió mucho a través de una nueva Carta Magna. Ofreció muchas cosas que no tienen la suficiente atención”. Los movimientos indígenas toman su propia palabra,” acotó.
ENDURECEN CRÍTICAS
Para el vicepresidente Álvaro García Linera, lo que hace USAID es formar sus grupos de amigos en cada país donde se infiltra. “Entre sus cómplices se encuentran dirigentes, Organizaciones no Gubernamentales (ONGs) y otras instituciones, para entregarles dinero a nombre de cooperación”, aseveró el pasado viernes.
Según su criterio, USAID no ayuda a Bolivia, colabora, más bien, a sus militantes políticos y seguidores, aclarando que cuando la prensa da a conocer el apoyo económico que brinda Estados Unidos a Bolivia no toma en cuenta este detalle.
Finalmente, negó que exista un doble discurso del partido de gobierno porque, según Linera, el apoyo que piden y reciben es de carácter “técnico y material” y, por lo tanto, no tiene nada que ver con el nivel “ideológico y político”, que es lo que más reprocha de su gobierno.
García Linera endureció las críticas contra la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo (Usaid) entidad a la que pidió dejar de inmiscuirse en asuntos del Estado boliviano e ir, por el contrario, a entrometerse en asuntos del país del Norte.
El mandatario hizo las declaraciones en el marco de la marcha iniciada por la Central Indígena de Pueblos del Oriente Boliviano (Cidob) desde Trinidad, Beni, demandando al Gobierno que la Ley Marco de Autonomías incorpore sus demandas respecto a territorio y recursos.
Dijo que el pedido de la Cidob apunta a perforar la Carta Magna, situación que no será aceptada porque esta posición proviene de sectores de la derecha que no están de acuerdo con los cambios que propugna el gobierno de MAS. “No está bien hermanos de la Cidob; no pueden atacar la Constitución Política del Estado, hay que defenderla, los que atacan son los de la derecha que dice que es una Constitución indigenista”, manifestó en una improvisada conferencia de prensa.
INTROMISIÓN POLÍTICA
En este marco, las críticas del Vicepresidente recrudecieron contra Usaid, dijo que no brindan cooperación al país, sino que hacen intromisión política. “Usaid paga salarios a opositores, tienen vínculos salariales con Usaid”, expresó.
Se refirió al Acuerdo Marco que esperan firmar los gobiernos de Bolivia y Estados Unidos y dijo que este documento tendrá duración y validez, pero pidió a Usaid mostrar transparencia. “Tiene que dejar de entrometerse en nuestra vida, organizaciones sociales, democracia e ideología. Que se vaya a entrometer a su país, que apoye a republicanos, a sus sindicatos. No es su misión entrometerse en asuntos del país”, insistió.
Pidió también en este sentido a las ONGs que reciben ayuda de Usaid, regularizar su situación y no impulsar acciones opositoras al Gobierno. “No pueden ser manejados por mano extranjera contra el Gobierno. Seguimos acumulando pruebas y esperamos un cambio de actitud. Seremos pacientes y tolerantes.
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