Entre ellos están los dirigentes de la Central Obrera Departamental Hugo Camargo y Juan Acosta, del magisterio rural Birgith Vargas y los maestros de la Escuela de Deportes.
Esta situación fue en aplicación al censo realizado por una consultora externa contratada por el Ministerio de Educación, realizado en el mes de junio, al no encontrar a los profesores en sus fuentes de trabajo, afirmó Padilla.
Indicó que el trabajo fue una especie de auditoría que se ejecutó únicamente en Trinidad y demás departamentos del país (posteriormente llegará a las provincias), por ello 6 maestros de la Escuela de Deportes, que trabajaban en unidades educativas y no en los ambientes asignados, también fueron suspendidos.
RETORNO
Para que los ítems de estos maestros les sean devueltos obligadamente deben arreglar su situación y condición dirigencial ante el ministerio del ramo, caso contrario continuarán acéfalos, porque no tienen ningún otro respaldo que acredite su condición.
Según Padilla, como autoridad trató en lo posible de evitar esta situación, principalmente en el caso de los dirigentes nombrados, sin embargo, no fue posible, ante exigencia de las autoridades del Gobierno.
“No tuve otra salida porque de no hacerlo podría ser sujeta a un proceso administrativo por desacato a mandato oficial”, Padilla lamentó que sus colegas tengan que pasar por este conflicto.
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