A menos de una semana de asumir la presidencia del Comité Cívico Pro Santa, el médico Herland Vaca Díez, señala que encontró una institución anticuada, desordenada, pobre en general y con una imagen deteriorada. Afirma que logró sacar a las logias y que la controlaban y que la mantendrá al margen de influencias políticas, de intereses económicos y otros sectoriales, para algunos ex presidentes y políticos, las logias mantienen su presencia dentro del ‘gobierno moral de los cruceños’ y que se debe trabajar también con dichas agrupaciones.
Vaca Díez, por su parte, aseguró por su parte que la inclusión de nuevos sectores será inmediata, igual que la conformación de comisiones de profesionales en diferentes áreas para convertir al Pro Santa Cruz en centro de excelencia y de información, de modernidad y civismo, que además recupere su credibilidad y gravitación en la región y el país.
Ya desde el interior, ¿cuál es su diagnóstico del Comité Cívico?
Tenemos que modernizarnos, lo veo atrasado, anticuado, desordenado, pobre en todo sentido, en recursos económicos, materiales, tecnológicos, en infraestructura y en el aporte intelectual sobre los temas regionales. Espero que estos dos años de gestión me den la oportunidad y el tiempo de posicionarlo en mejores perspectivas.
Se afirmó que su llegada al Pro Santa Cruz significa la salida de las logias que lo controlaron por décadas. Considerando el poder económico y sociopolítico de estos grupos no teme que el Comité quede sin respaldo, sin poder de convocatoria?
Creo que no, si bien el problema más grande que han tenido mucho cruceños y empresas, y muchos de los grupos de poder, es que ha primado el interés económico sobre el interés cívico o cruceñista, si el Comité retoma su liderazgo desde el punto de vista moral, porque la mayor fuerza del Comité debe ser moral e intelectual, eso no le perjudicará a nadie. Cuando hay política o se defienden solamente intereses económicos, no el beneficio de las mayorías, habrán algunos intereses económicos que quedan al margen, pero allá ellos porque no es la mayoría.
El anterior directorio realizó reformas que apuntaban a la apertura y mayor representatividad de la institución. ¿Usted continuará con este trabajo?
Se considerará como base, hay cosas que se deben revisar y darle cambios de forma en temas como inclusión de los indígenas, los barrios, las personas con discapacidad y las provincias, principalmente. Esto no admite más demora.
¿Esta apertura será cualitativa o también cuantitativa?
Hay que tratar que sea ambas, pero es más cualitativa. Ahora tenemos representación de 19 sectores y con modificación serán 25, que a su vez representan a más de 300 instituciones con sus delegados correspondientes. En las últimas elecciones votaron más de 250 personas, incluyendo past presidentes.
¿Esta política de apertura también se reflejará en dialogar con el Gobierno central, políticos, etc?
No hay ninguna barrera. Uno de nuestros propósitos es romper con tantas barreras que ha tenido el Comité o Santa cruz, no cerramos el dialogo con nadie. Pero vamos a tratar de que no haya barreras del otro lado también, porque si llegamos a conversar y nos ponemos de acuerdo en algo, que cumplamos todos. Los principios del Comité Pro Santa Cruz son verdad, honestidad, confianza.
El Gobierno por ejemplo según últimas encuestas nacionales perdió la confianza de la ciudadanía, eso debe ser una preocupación grande (…) la gente no cree en el gobierno, entonces, si no se confía en lo que dice una persona, no hay ganas de conversar o son pocas, aunque hay obligación a veces. Si nos ponemos de acuerdo en los principios, hablando con la verdad, yo estoy dispuesto a reunirme con todos.
Uno de sus vicepresidentes, Luis Alberto Áñez, ha manifestado menos apertura que Usted a dialogar principalmente con el gobierno central, ¿Cómo conciliarán posiciones?
El Comité sobre todo es presidencialista, yo soy más viejo que ellos y soy el presidente. He visto que ellos –los vicepresidentes- son muy leales y respetuosos, entonces creo que ni ellos ni yo nos aventuraremos a hacer cosas por propia cuenta, croe que habrá equilibro, control y que servirá la asociación de los tres, la simbiosis entre las diferentes tendencias dará el equilibrio.
Pero lo que nos dará el equilibrio y sabiduría suficientes será el trabajo y respuestas de las comisiones con profesionales que trabajarán sobre los temas que preocupan a la región y al país, como autonomías, inclusión, seguridad alimentaria, medio ambiente, narcotráfico, los derechos democráticos de las personas.
¿Cuándo comienza el trabajo de las comisiones?
Me contactaré con los profesionales interesados en trabajar, son como 50, muchos creo yo, hay que ver que el Comité no se vuelva a afectar con política, los grupos de poder, ni intereses que no sean los del Comité y que el Comité siempre esté por los intereses de la región. Que cuando defendamos algo lo hagamos con mucha energía, valor, con la certeza de que estamos en lo cierto. Entonces no se necesita ser más duro. Mire lo que hemos hecho sin necesidad de dar puñete a nadie.
Queremos que el análisis de la mayoría de la realidad cruceña esté lista en unos 3 o 4 meses.
¿Qué otros cambios se realizarán?
Otros aspectos como la forma de proyectar al Comité para los próximos 20 o 50 años, se necesitan estudios más profundos y que se aprueben por consenso, ese será uno de los grandes cambios que se producirán n el Comité, y como ahora, sin un puñete, sin un papirote. Fíjese que las logias se van sin reclamar, sin ningún acto de violencia, eso es Santa Cruz, esa es la forma más democrática y sana de hacer cambios en la sociedad, se pueden hacer sin violencia y con concertación, eso me entusiasma.
También estamos planificando una especie de Constituyente Cívica, solo para los estatutos de los comités cívicos de todo el departamento y que puede servir de modelo no sólo para Bolivia sino para cualquier región de Latinoamérica o el mundo que viva en situaciones parecidas y o problema similares.
En esa constituyente meramente cívica que se consultará con profesionales, directores, etc., no tendrá influencia política, económica, ni de algún interés sectorial o de grupo, que no sea cívico. Estarán los cívicos que tengan vocación de servicio, calidad y principios morales, trayectoria de servicio a la comunidad. La representatividad cívica no corresponde con la representatividad política.
¿En qué temas más se trabajará para revertir la situación actual del ente cívico?
El Comité Pro Santa Cruz es un sistema corporativo que tiene que reflejar lo mejor que tiene Santa Cruz, desde el punto de vista moral, del comportamiento. Entonces de aquí para adelante vamos a trabajar para que el Comité sea la representación de la excelencia en todos los aspectos que interesen a Santa Cruz.
También debe ser una escuela de civismo y vamos a preocuparnos mucho por los aspectos culturales considerándolos como una forma de convivir juntos, una forma de modular nuestro pensamiento para los cambios modernos, para que todos comulguemos en la construcción de la imagen y de visión de lo que queremos para Santa Cruz y cultivar y practicar los principios y valores.
El Comité que representa a todo el departamento de cierta forma, también debe tener relación con los otros departamentos y el Gobierno, para eso también tiene que desarrollar un centro de información y de análisis, con un equipo de profesionales que estará integrado en diferentes comisiones y un gabinete de secretarías de asesoramiento a los directivos (…) Nosotros necesitamos producir algo que oriente a la gente, que dé respuestas, no tenemos presupuesto, no ejecutamos nada, pero si tenemos capacidad, podemos aconsejar al Alcalde al Gobernador, a las instituciones, sobre qué se puede hacer o mejorar.
Pero se necesita un centro de excelencia como en la U, no tiene que haber política, si bien tiene que haber ideología tiene que ser la de producir conocimiento, enseñanza, aplicar tecnología.
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