"El convenio marco con Estados Unidos está terminado, sólo tenemos que tomar una decisión sobre cuándo y dónde lo suscribiremos", dijo Choquehuanca.
La relación bilateral con Estados Unidos se ha visto afectada como nunca antes desde que el presidente Evo Morales asumió el mando de la nación en enero de 2006.
Desde entonces, Estados Unidos suspendió el programa de preferencias arancelarias para los muebles, joyería, productos de cuero y de alpaca que eran exportados bajo el marco de los resultados de la lucha contra las drogas y redujo su personal y cooperación.
El Presidente también contribuyó con el distanciamiento al unirse a los ataques de su similar venezolano, Hugo Chávez contra "el imperio" y expulsar al embajador Philip Goldberg.
Ayer el canciller Choquehuanca dijo que Bolivia exigirá que se preserve el principio de "no intromisión" en asuntos internos entre ambos países.
"Esos hechos tienen que ser esclarecidos y Bolivia tiene que evaluar esa situación", dijo el jefe de la diplomacia boliviana en alusión a las denuncias de Quintana, quien afirmó que "millones de dólares" de Usaid fueron usados de manera irregular para ejecutar la agenda de intromisión estadounidense.
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