La ministra de Desarrollo Productivo, Teresa Morales, aseguró el miércoles que se descarta la implementación de una banda de precios para el cemento e informó que se trabaja con el sector cementero del país, para garantizar la importación de clinker, insumo básico para la elaboración de ese material de construcción, en el país.
En una conferencia de prensa, Morales aseguró que “no hay un precio oficial, no existe banda de precios para el cemento” al revelar que se trabaja con el sector cementero en un intercambio de información, de la cual “hemos detectado que es imprescindible mantener una importación de clinker”.
Explicó que el incremento de precios de ese material de construcción se produjo a causa de la importación de clinker del continente asiático, por algunas empresas, porque en América Latina no existe una empresa proveedora de ese insumo básico.
“En América latina no hay clinker disponible para poder comprar y se está trayendo clinker del Asia, eso está encareciendo los costos de las empresas”, argumentó.
Después de una reunión realizada el pasado martes con la industria cementera del país, Morales informó que no existe ningún acuerdo hasta el momento, porque se trabaja para garantizar el abastecimiento de cemento en el país y para estabilizar su precio.
Desde la pasada semana, cinco de las seis fábricas de cemento del país subieron el precio de su producto hasta en un 7%. Sólo Fancesa mantiene su precio.
La bolsa de 50 kilogramos de cemento producida por la Sociedad Boliviana de Cemento (Soboce) subió de 50 a 53,5 bolivianos; y en el caso Irpa Irpa, de la Cooperativa Boliviana de Cemento (Coboce), pasó de 52 a 58 bolivianos.
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