15 de ago.- Los yacimientos de Kori Kolo, en Oruro, y de Don Mario, en Santa Cruz, se agotaron y la producción de oro en el país bajó 59% entre 2001 y 2010, de 15,5 a 6,4 toneladas (t), revela un informe de Gold Survey 2011 de la consultora minera inglesa GFMS.
El informe precisa que la producción del metal dorado en el país fue en franca declinación y cedió espacios a sus competidores a nivel regional y mundial.Por ejemplo, en 2002 la producción de oro bajó a 14,4 t, en 2003 a 9,9 t y en 2004 llegó a 4,8 toneladas.
En 2005, el sector se recuperó y llegó a obtener 8 t del mineral, en 2006 unas 9,6 t cifra que se redujo a 8,8 t en 2007, a 8,4 t en 2008, a 7,2 t en 2009 y a 6,4 t en 2010.
El viceministro de Desarrollo Productivo Minero Metalúrgico, Héctor Córdova, informó que la producción del oro se redujo porque los yacimientos del mineral se “están acabando”.
Habían dos grandes yacimientos que estaban en explotación, el de Kori Kolo, en Oruro y de Don Mario, en Santa Cruz, pero los dos se agotaron. “Hace poco más de un año terminaron su vida (productiva), entonces la gran producción que aportaban estas dos minas desapareció”, afirmó Córdova.
De acuerdo con los datos de la Memoria 2010 del Ministerio de Minería y Metalurgia, durante los últimos años, la producción aurífera estuvo influenciada por los proyectos mineros Kori Kollo y Kori Chaka, en Oruro; y Don Mario, en Santa Cruz.
La participación de estas mineras permitió, en 2006, alcanzar una producción de 10 t. Sin embargo, en los años posteriores, los yacimientos recondujeron su capacidad hasta producir sólo 6,4 t año.
NUEVOS PROYECTOS
Mientras el trabajo de las grandes empresas se aminora, la explotación de oro por parte de los cooperativistas y mineros chicos ha crecido significativamente, principalmente en distritos de La Paz, Beni y Pando.
“Trabajar con oro es mucho mejor, particularmente porque ahora el precio del oro superó los 1.600 dólares la onza troy y porque los costos de operación no son tan altos como con otros minerales”, comentó Córdova al advertir que también la actividad clandestina de explotación del metal dorado continúa.
Para frenar este ilícito, en 2010 el Gobierno puso en marcha la Empresa Boliviana del Oro (EBO) para comprar el mineral que se obtiene en las zonas del río Suches, en La Paz. La tarea a largo plazo de EBO es incursionar en labores de exploración y explotación para elevar los niveles de producción del mineral.
A esto se suman, las reservas de oro por más de 3 millones de onzas que duermen en los yacimientos de Amayapampa (Potosí) y Challapata (Oruro). Las empresas mineras privadas Nueva Vista SA —filial de la australiana Republic Gold Limited (RGL)— y la canadiense Castillian Resources Bolivia SA, trabajan en estas zonas.
Nueva Vista SA empezará, en el segundo semestre de este año, las tareas de explotación de los yacimientos de Amayapampa, ubicados en el municipio de Chayanta (norte de Potosí). En tanto, Castillian Resources Bolivia SA debe lograr la aprobación de la población de Challapata para poner en marcha el proyecto.
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