El Jefe de bancada y Diputado de Unidad Nacional, Jaime Navarro envío ayer una carta al Presidente Evo Morales en el que le pide la suspensión temporal del Ministro de Gobierno, Sacha Llorenti y del Comandante de la Policía Nacional, Gral. Oscar Nina, para que ambas autoridades enfrenten el proceso judicial que se les inició por la supuesta comisión del delito de incumplimiento de deberes y abuso policial, en el caso Uncía y otros.
"Esto es para que ellos despojados de las altas funciones que desempeñan puedan asumir la defensa por las denuncias y las querellas que tienen. Son tres casos que han conmocionado al país, comenzando por Caranavi en mayo, el linchamiento de Uncía y en el peaje de la (ex) autopista La Paz- El Alto, donde se confirma que David Olorio fue torturado y asesinado en dependencias de la Policía Boliviana", aseguró.
Navarro se presentó en Palacio Quemado para presentar la solicitud de suspensión de esas dos autoridades para que éstas asuman su defensa como ciudadanos "de a pie" en los procesos judiciales instaurados en su contra.
Recordó que personalmente presentó una denuncia penal ante Ministerio Público en contra de Llorenti y Nina, además de otros dos altos jefes policiales, por incumplimiento de deberes y negación de auxilio a cuatro policías que fueron linchados en la población de Uncía en mayo último.
En el caso Caranavi, a tres meses de lo sucedido, la Policía no retornó a esa localidad y solo existe un detenido y que es de parte de los bloqueadores, "la investigación se detuvo y aún no se presentó el informe de la investigación en la Cámara de Diputados".
Sobre el caso del linchamiento en Uncía, donde se comprobó que uno de los policías, murió varios días después de conocerse el hecho, en este caso sólo existen declaraciones de los denunciantes y no fueron a declarar las autoridades denunciadas el Ministro Llorenti y el Comandante Nina.
"La esperanza que tenemos es que el Presidente sea Presidente de todos, que no se solidarice con su Ministro únicamente, que el Presidente dé una señal con los familiares de los fallecidos, hijos, esposas, padres, hermanos, con ellos tiene que estar el Presidente y tiene que garantizar que las investigaciones lleguen a término y que los responsables asuman la sanción que establece la Ley", señaló.
"Hay indicios serios que en la Policía se practica la tortura, se actúa con negligencia como en Caranavi, por eso es importante que el Presidente tome cartas en el asunto y disponga la suspensión temporal de estas dos autoridades", insistió.
Además, dijo que "hay indicios muy serios de tortura" en la muerte de David Olorio Apaza, sospechoso del atraco del 4 de julio al peaje de la Autopista La Paz - El Alto.
A su juicio, es probable que Olorio muriera por las lesiones que funcionarios de los Servicios de Inteligencia de la Policía le ocasionaron cuando era interrogado, para dar con la banda de delincuentes que asaltó y mató a un uniformado.
Por otra parte, Navarro remarcó que las investigaciones en los casos de Caranavi y Uncía "no avanzan" debido a la influencia que ejerce Llorenti y Nina sobre los operadores de justicia. Explicó que en el caso de Uncía los familiares de las víctimas mantiene la querella criminal contra el Ministro de Gobierno.
Insistió en que la suspensión de esas autoridades garantizará que la investigación "no tenga interferencias".
"Si después de la investigación se determina que no hay culpabilidad, recibiremos al Ministro, recibiremos a los Comandantes de la Policía con banda, con fiesta, pero que su defensa lo hagan como ciudadanos de a pie, que la ley sea para todos, que no hayan privilegiados", remarcó.
Finalmente, Navarro recordó que Llorenti y Nina enfrentaron varias crisis de seguridad ciudadana que pusieron en duda la eficacia de sus decisiones. Lo hizo en Caranavi al instruir a la Policía usar armas de fuego, no pudo sofocar un motín en Chonchocoro, actuó de manera negligente en Uncía y permitió la tortura de detenidos en las celdas de la Policía.
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