No estamos contentos con la Bolivia que heredamos

Maricruz Mendoza Ugarte

En el marco del festejo de los 185 años del primer grito libertario de Bolivia en nuestro departamento, el gobernador cruceño Rubén Costas expresó que los bolivianos no se sienten contentos con el país en el que viven debido a los grandes problemas que éste enfrenta y que parecen acrecentarse con el transcurrir del tiempo.
“Tenemos que decir que a pesar de los 185 años transcurridos, no estamos contentos con el país que heredamos ni con el que hoy tenemos, ¿Cómo podríamos estarlo, en medio de tanta pobreza, injusticia, exclusión y atraso?”, se cuestionó Costas a tiempo de afirmar que el compromiso de los bolivianos con la patria, les exige trabajar y luchar por una Bolivia diferente, que se integre día a día en el anhelo común por el bienestar de todos sus hijos.
Sostuvo que la población debe crear una Bolivia, en la que se reconozcan las diferencias existentes y se acepte la diversidad, así como también la riqueza de los pueblos y raíces indígenas.
El primer mandatario del departamento lamentó una vez más que el acto principal de los festejos patrios se haya realizado en la capital oriental puesto que reconoce que la sede debió ser, por derecho, la ciudad de Sucre.
“Si en esta ocasión, este seis de agosto, Bolivia, lo celebra en Santa Cruz, es sólo circunstancial. Nuestros corazones están en la tierra que vio nacer a la patria y que dio su sangre para sostener la República una y otra vez. La Bolivia que nació en Sucre crecerá como quisieron nuestros próceres, será una República de justicia y de libertad”, manifestó.
Costas se refirió a los políticos e intelectuales que, a su consideración, propugnan su fin, la búsqueda del poder total y la imposición de un pensamiento único.
“Están históricamente equivocados. Así, con imposiciones e intolerancias no se hace patria ni se logra la unidad”, aseguró.

“ENTRENAR A CIVILES
ES FOMENTAR EL ODIO”
La autoridad departamental, en su intervención durante el desfile cívico-militar, dio a conocer su posición con respecto a la instrucción militar que están recibiendo los movimientos sociales para ‘defender a la Patria ante cualquier eventualidad’, según el Ejército, medida que calificó de ‘irracional’.
“Ocuparse de fomentar el odio y caer en la irracionalidad de llegar al extremo de entrenar militarmente a civiles para guerras contra enemigos inexistentes, no nos llevará a ninguna parte, salvo a una espiral de confrontación donde nadie saldrá victorioso”, afirmó.
Rubén Costas subrayó que el país que se necesita es el país de las autonomías y puso de ejemplo al departamento cruceño que ‘lucha’ por avanzar en el proceso autonómico.
ENTRE DISCUSIONES Y DESAIRES
El festejo del seis de agosto se realizó en medio de enfrentamientos verbales entre grupos de personas que portaban la bandera cruceña y aquellos que hacían flamear la ‘wiphala’.
Al inicio de la jornada, cuando la población se dio cita en la plaza 24 de Septiembre para presenciar la iza de la bandera nacional a cargo de las principales autoridades del país y del departamento, se generó una discusión cuando efectivos de la policía nacional se aprestaron a retirar los mástiles que se habían ubicado al lado de los cuatro mástiles que portarían las cuatro tricolores nacionales, en estos se tenía previsto hacer flamear la bandera cruceña.
Las personas comenzaron a protestar cuando se percataron que los mástiles estaban siendo removidos, debido a la discusión generada, autoridades departamentales tuvieron que intervenir. El secretario general de la Gobernación cruceña, Roly Aguilera, se dirigió a los efectivos policiales para exigirles que dejen el soporte en su lugar. Los policías argumentaron que los dos mástiles adicionales no figuraban dentro del programa oficial acordado, pero Aguilera alegó que si bien se había establecido que la enseña departamental no sería izada, no estaba estipulado que ésta no podía flamear en la plaza central del departamento.
Ante este argumento, los uniformados cedieron a la petición de permitir que los mástiles permanezcan en el lugar, decisión que fue aplaudida por la ciudadanía.
El presidente Evo Morales y el vicepresidente Álvaro García Linera no estuvieron presentes ni el Te Deum ni en el desfile cívico-militar, lo cual fue calificado como un ‘desaire’ por las personas que se dieron cita en el lugar.
Los espectadores aseguraban que el Presidente ‘peleó’ tanto para que la sede del festejo fuera la ciudad de Santa Cruz, sin embargo, no se ‘dignó’ a presentarse en todos los actos programados para dicho festejo.

EXPRESIONES ENCONTRADAS
La llegada de las autoridades nacionales y departamentales a la plaza principal, fue producto de un ‘cruce de palabras’ entre los grupos que llegaron al lugar para ser parte de la festividad patria.
Cuando hizo su entrada el gobernador cruceño, se oyeron aplausos, y gritos que decían: gobernador!, aunque de fondo también se escuchaban ‘abucheos’ a la autoridad departamental mientras desfilaba, de igual manera, cuando el Presidente Morales ingresó al centro de la plaza, un grupo de personas que portaban wiphalas, le gritaban: Evo!, Evo! Mientras otras, intentaban que el grito de apoyo al gobernador Costas, predominara.

PIDIERON A LAS AUTORIDADES ‘TENER HUEVOS’
Durante el desfile cívico-militar, un grupo de cívicas y los miembros de la Unión Juvenil Cruceñista, hicieron su paso vestidos de negro, tal y como lo habían anunciado.
Estos marcharon frente al palco oficial portando carteles que rezaban: “Democracia Q.E.P.D.”, “Bolivia muere, Evo cumple”, “Morir antes que sin Bolivia vivir”, entre otros.
Con sus vestimentas hicieron alusión a que estaban de luto por la muerte de la democracia y la libertad en el país, un grupo de ellos, cargaban un ataúd, tal como si fueran rumbo a un entierro, incluso, la diputada Vanesa Moreno, desfiló sosteniendo en su mano, una bolsa con huevos, la cual levantó y mostró enfáticamente a las autoridades que se encontraban observando el desfile desde el palco oficial. 
Nota: el Mundo