“Bolivia sí avanzó en la construcción de una sociedad con mayor igualdad” pero “quedan brechas y desigualdades muy grandes”. Con esas palabras Yoriko Yasukawa, coordinadora residente de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y representante del PNUD en Bolivia, presentó ayer, en Sucre, el informe nacional sobre desarrollo humano en Bolivia “Los cambios detrás del cambio”, en el Salón de Convenciones.
Ante ese panorama, es el momento para actuar, añadió Yasukawa, quien aseguró que Bolivia tiene la “oportunidad única” para dar un salto grande hacia la igualdad.
“Tenemos condiciones macroeconómicas favorables y como consecuencia también recursos fiscales como nunca antes, un Gobierno comprometido con combatir la desigualdad y la discriminación, una nueva Constitución Política del Estado, que consagra estos principios con avances importantes en el proceso legislativo, y una sociedad civil organizada con capacidad de exigir que estas metas se cumplan”, apuntó.
Refirió que las conclusiones del informe recomiendan orientar las políticas tanto sociales como económicas a la garantía universal de derechos y al combate a la desigualdad. “Parecen cosas obvias, pero igual hacen falta”, remarcó.
Instó además a la sociedad a sostener la exigencia de las metas mínimas y obligar a los gobiernos a cumplirlas. “Son metas que nos pueden unir a todos de verdad” porque apuntan a una educación básica de buena calidad en un país en donde uno de cada cuatro niños no termina ni siquiera la primaria.
A su turno, el secretario general de la Gobernación de Chuquisaca, Hugo Loayza, hizo mención a las críticas del informe y reconoció que permitirán “mejorar y hacer que Chuquisaca y Bolivia avancen”.
Asimismo, destacó el informe que pese a las críticas sí reconoce los cambios en la sociedad boliviana, “gracias a las decisiones claras como los bonos Juancito Pinto y Juana Azurduy de Padilla, y la Renta Dignidad, que hacen que los índices de pobreza disminuyan”, según sus palabras.
Al acto de presentación del informe del PNUD asistieron las principales autoridades del Poder Judicial y de la Gobernación.
Ante ese panorama, es el momento para actuar, añadió Yasukawa, quien aseguró que Bolivia tiene la “oportunidad única” para dar un salto grande hacia la igualdad.
“Tenemos condiciones macroeconómicas favorables y como consecuencia también recursos fiscales como nunca antes, un Gobierno comprometido con combatir la desigualdad y la discriminación, una nueva Constitución Política del Estado, que consagra estos principios con avances importantes en el proceso legislativo, y una sociedad civil organizada con capacidad de exigir que estas metas se cumplan”, apuntó.
Refirió que las conclusiones del informe recomiendan orientar las políticas tanto sociales como económicas a la garantía universal de derechos y al combate a la desigualdad. “Parecen cosas obvias, pero igual hacen falta”, remarcó.
Instó además a la sociedad a sostener la exigencia de las metas mínimas y obligar a los gobiernos a cumplirlas. “Son metas que nos pueden unir a todos de verdad” porque apuntan a una educación básica de buena calidad en un país en donde uno de cada cuatro niños no termina ni siquiera la primaria.
A su turno, el secretario general de la Gobernación de Chuquisaca, Hugo Loayza, hizo mención a las críticas del informe y reconoció que permitirán “mejorar y hacer que Chuquisaca y Bolivia avancen”.
Asimismo, destacó el informe que pese a las críticas sí reconoce los cambios en la sociedad boliviana, “gracias a las decisiones claras como los bonos Juancito Pinto y Juana Azurduy de Padilla, y la Renta Dignidad, que hacen que los índices de pobreza disminuyan”, según sus palabras.
Al acto de presentación del informe del PNUD asistieron las principales autoridades del Poder Judicial y de la Gobernación.
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