Gobierno e Iglesia ponen fin a controversia sobre drogas

El arzobispo de Cochabamba se disculpó ayer públicamente

Cochabamba - Cambio


El Gobierno, la representación de los cocaleros del trópico de Cochabamba y la Iglesia Católica mediante el arzobispo de Cochabamba, monseñor Tito Solari, pusieron ayer fin a la controversia surgida en torno a la declaración que hiciera el religioso sobre la presunta presencia de niños en la venta de cocaína.

Solari se reunió anoche en la ciudad de Cochabamba con el viceministro Felipe Cáceres y los representantes de las Seis Federaciones cocaleras. La reunión fue calificada como un reencuentro que permitirá coordinar el trabajo de lucha contra las drogas en el país.

El viceministro Cáceres expresó que para el Gobierno es una satisfacción aclarar la situación. “Después de un diálogo sincero y de entendimiento, como Gobierno recibimos las sugerencias y preocupación sobre las drogas por parte de la Iglesia. No vamos a escatimar esfuerzo en el combate al narcotráfico, que no viene de esta gestión, sino de mucho antes”, señaló.

El monseñor Solari, por su lado, manifestó que la reunión fue positiva y eso demuestra la voluntad de todos de trabajar coordinadamente.

“Éste ha sido un reencuentro, se ha realizado gracias a Dios un diálogo sincero, hemos compartido preocupaciones, pero lo más importante es que hemos visto que es posible trabajar juntos”, expresó.

DISCULPAS

El monseñor Tito Solari, horas antes del encuentro en Cochabamba, ofreció disculpas por las declaraciones que realizara en torno a la supuesta participación de niños en la venta de cocaína en regiones del trópico de Cochabamba.

“Yo quiero de veras disculparme, decir a estas personas que mi ánimo no era esto (ofenderlas), mi ánimo era el de manifestar una preocupación que sentía muy adentro, que he compartido con personas”, expresó.

El religioso declaró hace algunas semanas que conoció testimonios de padres de familia y algunos profesores sobre la presencia de menores de edad en la venta de cocaína. Además, mencionó que durante su permanencia en el trópico cochabambino escuchó, por las noches, sobrevolar avionetas y presumió que eran de narcotraficantes.

Solari, en un breve encuentro con los medios de comunicación, Solari dijo estar apenado por los problemas suscitados por sus declaraciones.

“Toda esta problemática que sin querer, pues, se ha suscitado por una declaración que hice hace bastante tiempo. Me he quedado dentro con una pena grande, y la pena que tengo es que quizás alguna persona se ha sentido ofendida o se ha sentido juzgada por mis palabras, no era mi intención, eso yo quiero de veras disculparme, decir a estas personas que mi ánimo no era esto (...) Lo que deseo grandemente es que vayamos construyendo en bien de un país que necesita, y colaborándonos, no enfrentándonos”, manifestó.


Datos

Denuncia: La declaración de Solari sobre la presunta participación de menores en la venta de droga generó molestia en los cocaleros del Chapare.

Disculpas: El arzobispo de Cochabamba se disculpó por sus declaraciones y señaló que no era su intención provocar una problemática en torno a ello.


Isaac Ávalos: La ofensa fue para todo el trópico

La Paz - Cambio


El senador del Movimiento Al Socialismo (MAS) por el departamento de Santa Cruz, Isaac Ávalos, declaró ayer que el monseñor Tito Solari ofendió con sus declaraciones a todo el trópico de Cochabamba y que las disculpas que haga tiene que darlas a los pobladores de esta región y no sólo mediante los medios de comunicación.

“Que pida disculpas a todo el trópico de Cochabamba, eso con seguridad que será aceptado; la disculpa tiene que ser ante todos, es decir, ante los medios y ante los pobladores del Chapare”, declaró.

El legislador consideró que es de sabios reconocer cuando se ha cometido un error. “Cuando uno comete un error hay que reconocerlo y pedir las disculpas del caso, él (Solari) ha cometido un error muy grande y por eso tiene que disculparse ante el pueblo del trópico de Cochabamba”, señaló.

El arzobispo de Cochabamba declaró, hace semanas, que durante su estadía en el trópico de Cochabamba escuchó preocupaciones de padres de familia y algunos profesores sobre la presencia de menores de edad en la venta de cocaína a los viajeros que pasan por las poblaciones del Chapare.

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