Bolivia, Santa Cruz 06 de septiembre (elSistema.info).- Según datos del Instituto Bolivia del Comercio Exterior (IBCE), el año 2010 Bolivia gastó 5.500 millones de dólares en las importaciones (cifra record, nunca antes vista en Bolivia), este año lamentablemente prevén que el valor por las importaciones se incremente al menos mil millones de dólares.
Estas proyecciones preocupan al sector, porque cada la balanza comercial tiende a importar y amenaza con dejar rezagada a las exportaciones.
El Gerente General del IBCE, advirtió que la dinámica importadora de bienes está subiendo y teme que en el último trimestre del año, temporada que entran al país productos concernientes a las fiestas de fin de año, la tendencia importadora sea superior a las exportaciones bolivianas, en especial las del sector no tradicional.
“No sería de extrañar que las importaciones este año puedan estar por encima de los 6.500 millones de dólares y eso es una llamada de atención porque si las importaciones están creciendo a una mayor tasa que las exportaciones esto determinará un menor superávit, un menor saldo comercial positivo en la balanza”, informó Gary Rodríguez.
El Gerente General del IBCE recordó que al menos el 70% de las Reservas Internas Netas (RIN), se han logrado gracias a la dinámica exportadora de los años 2006 y 2011y si ahora la tendencia exportadora no crece de la misma manera que las importaciones, Bolivia perderá la capacidad de generar mayores saldos positivos para alimentar las RIN, advirtió.
“Si las importaciones crecen quiere decir que cada vez estamos cediendo una mayor parte de nuestro mercado a la producción extranjera. Un dólar generado por la exportación equivale a un dólar ahorrado por importación, si tuviéramos una verdadera agenda pública productiva que se ocupara de salvaguardar los mercados externos, con toda seguridad que exportaríamos y eso sería virtuoso por que el saldo que generaríamos sería incluso mayor de lo que hemos venido viendo en los últimos años”, añadió Rodríguez.
Para finalizar el IBCE recomendó tres tareas para que el Gobierno central las haga suya si quiere sacar a flote al sector exportador y de esta manera generar más divisas para el país. El primero es la seguridad jurídica (a las tierras y a la inversión); mercados seguros (mercado interno con productos a precios razonables y mercados externos asegurados sin trabas a la hora de exportar) y por último adoptar políticas públicas coherentes que se ocupen de hace competitivas la producción boliviana.
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