Según uno de los denunciantes, Eduardo Cuno Quijahuamán, los militares bolivianos habrían golpeado a Roberto Irarica Achahui, quien supuestamente se encontraba trabajando en la chacra, y se habrían llevado su motocicleta, según reporte del diario El Comercio de Lima.
Cuno señaló que si bien desconocen los motivos de esta agresión, suponen que los efectivos de la institución castrense de Bolivia buscan asustarlos para que se retiren de la zona.
LA CUARTA DENUNCIA
El mayor Luis Ubillús, jefe de la División de Seguridad de Fronteras de Perú, señaló que esta es la cuarta denuncia formal que reciben de campesinos por un conflicto limítrofe con Bolivia.
Según Ubillús, estos problemas siempre tienen que ver con la tala ilegal que se realiza a ambos lados de la frontera pero la fiscalización en temas ambientales es mayor por parte de los bolivianos.
"Tenemos información de que los guardabosques bolivianos amenazan a pobladores peruanos con quemar sus chacras si los encuentran sacando madera de Bolivia. Hay que ver qué arrojan las investigaciones esta vez", afirmó Ubillús.
Tanto la denuncia como el avance de las investigaciones fueron remitidas a la Cancillería en Lima. Según el mayor Ubillús, es esta la entidad competente para solicitar explicaciones a las autoridades bolivianas.
DESMENTIDO OFICIAL
En La Paz, el Servicio Nacional de Áreas Protegidas (SERNAP) negó que militares bolivianos hayan ingresado a territorio peruano.
"El cuerpo de guarda parques que está a cargo del cuidado y conservación de esta reserva de vida silvestre el día 17 de agosto hizo una inspección rutinaria por el arroyo Bai, muy cercano a la frontera con el Perú. A tres kilómetros hacia el este de la frontera se encontró a un grupo de súbditos peruanos haciendo explotación de recurso forestal maderable dentro de la reserva", informó a la agencia ANF Carlos Ugarte, técnico de ordenamiento territorial del Servicio de Áreas Protegidas.
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