que los actores hicieron conocer en su debido tiempo y hasta llegar al cansancio.
Muchas cosas suceden en nuestro medio que no tienen respuesta ni provocan reacción de las autoridades, pese a ser temas de muy larga data y que reiterativamente se comentan y se reclaman.
Enumerar las dificultades que tropiezan y atraviesan los artistas en nuestra ciudad sería llenar esta página, solo basta con citar algunos problemas que provocan el retrazo del desarrollo de la cultura y la falta de respuesta de las autoridades.
Comenzaremos mencionando el rechazo que ha generado la Ley 017 de abril de este año que fue aprobada por la Asamblea Legislativa Departamental declarando como palacio legislativo al teatro y hotel IV Centenario.
Los artistas se movilizaron y opinaron para evitar que esta ley sea promulgada manejando varios argumentos de simple entendimiento y comprensión.
Una razón de los artistas es el objetivo para el cual fue construida esta infraestructura, que tiene todas las características naturales y técnicas para funcionar como teatro, tomando en cuenta su estructura, dimensiones y ambientes.
También se menciona el estilo, forma y espacio que tiene el teatro, especialmente diseñado para actividades artísticas, incluido la exhibición de películas.
Con tantos antecedentes, los artistas no entienden la razón y el porqué la Asamblea Legislativa quiere adueñarse de este edificio y el fin que le darían si no fuera para otras actividades que no sean culturales.
Felizmente los asambleístas y después de un amplio análisis, decidieron exigir una respuesta del Gobernador que por mandato debe promulgar o rechazar esa Ley.
El presidente de la Asamblea Legislativa informó que esperan una respuesta de la autoridad y en caso de ser vetada, la ley sería reconsiderada y cambiaría en el tema del teatro y el uso exclusivo que señala este instrumento legal.
Sin embargo, los artistas pidieron un informe legal y una audiencia con el Gobernador para tratar y discutir este tema, lo que todavía no fue respondida y tampoco se realizó el encuentro con la autoridad.
Por otro lado se ha informado que existe una propuesta de una ley que determinaría la forma de administración del teatro IV Centenario presentada por un artista potosino.
Con muchos argumentos y justificativos se plantea que sean los artistas los encargados de administrar ese edificio a través del Consejo Departamental de Culturas.
Esta intención mejoraría de alguna manera el desarrollo de la cultura en nuestra ciudad, porque los mismos protagonistas se encargarían de elaborar planes y programas culturales, teniendo cerca un edificio que ofrece todas las comodidades para convertirse en un complejo cultural.
La falta de políticas culturales podría ser cubierta por las iniciativas de los propios actores, quienes se encuentran dispuestos a ser los protagonistas directos de su propio desarrollo, como se dijo repetidas veces.
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