en la fase de grupos de la Liga de Campeones, con un triunfo que transformó en goleada Carlos Marchena, en el minuto 82.
Los daneses aguantaron la primera parte, con una gran actuación de su portero Wessels, pero se vio superado por una segunda parte estelar de los castellonenses y de Rossi.
Salió el Villarreal con una clara vocación ofensiva y con un planteamiento claro para buscar la remontada. El técnico Juan Carlos Garrido, sin lateral derecho por la lesión de Ángel y un proceso febril de Mario Gaspar, el lateral habitual, decidió apostar por colocar a un central como el mexicano Zapata de lateral y un centrocampista como Bruno, como central marcador.
Con ello, salió el equipo de español a por todas y con mucha intensidad, lo que propiciaron cinco minutos de llegadas y de remates. Con un buen remate de Rossi y una falta lanzada por Senna, a las que respondió bien el portero del Odense se abrió un partido que pintaba bien.
Pero el equipo danés se plantó serio, bien encerrado atrás y sin nervios. Ello propició un dominio claro de los españoles pero con pocas llegadas y sin continuidad.
Las ocasiones llegaban, pero no para hacer dudar al Odense, que se mantenía serio en su posicionamiento. Aunque el Villarreal, como ya hizo en Dinamarca, era superior no acertaba ante el gol y eso que la tuvo hasta en cinco ocasiones, con remates de Rossi, Valero y Nilmar, que encontraron siempre la respuesta del portero Wessels, sin duda el mejor de su equipo.
El encuentro disputado en el Madrigal tuvo la presencia de 24.000 espectadores, en las graderías.
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