Otro atentado contra el río Piraí quedó al descubierto ayer, cuando la comisión de la mancomunidad metropolitana de municipios encontró una zona enmallada en la orilla de Porongo, donde también el bosque de protección ha sido destruido por la maquinaria pesada que explota los áridos para una empresa privada.
La inspección de ayer se efectuó desde el kilómetro 12 hasta las cabañas situadas al final de la avenida Roca y Coronado, abarcando los municipios de La Guardia, Porongo y Santa Cruz de la Sierra.
La parte más dañada del sector está en el tercio medio que corresponde a Porongo donde hay una treintena de dragas en explotación.
“Lo ideal es que trabajen solo dos dragas por hectárea, pero en esta zona vemos que hay pozas profundas, por lo que hemos emitido sendas notificaciones, pero los propietarios de las máquinas no hacen caso”, reveló Álex Carrasco, responsable de Medio Ambiente de La Guardia.
“Los trabajadores no quieren agarrar la citación que emitimos tras haberlos encontrado 200 metros más allá de la orilla del río. Completaremos el informe y en conjunto con la mancomunidad veremos que intervenga la Fiscalía y el Gobierno para que vean el desastre”, anotó Julio César Carrillo, alcalde de Porongo y presidente de la mancomunidad metropolitana.
“Los 100 comunitarios que se benefician con la explotación en ambas orillas pedimos que se cumpla la ley y que no permitan que los concesionarios abusen de la extracción”, refirió Enrique Luna, abogado de la Asociación Nueva Esperanza.
Para el concejal por el MAS en Santa Cruz de la Sierra Hugo Siles, la pausa ecológica es una alternativa para detener la sobrexplotación, pero por ahora solo buscan aplicar las normas.
“Esperamos la presencia de la ministra de Medio Ambiente y Aguas, Mabel Monje, para que también vea los caminos no autorizados que se construyen para el ingreso de camiones grandes para explotar los materiales”, añadió Siles.
“La pausa temporal hasta que se arregle la situación es lo más indicado”, dijo el responsable de Medio Ambiente de la Alcaldía de Porongo, Carlos Ayala.
Además, los beneficiarios de Puerto Piraí criticaron que los concesionarios grandes no respeten los 200 metros a cada lado del gasoducto que pasa por el kilómetro 8 y medio, por donde no deben explotar.
Por último, el representante del Servicio de Encauzamiento de Aguas y Regularización del Río Piraí (Searpi), Álvaro Leigue, sugirió respetar el tercio medio para evitar tragedias en caso de riadas.
El cronograma de visita a las riberas del Piraí continúa hoy en los municipios de Porongo y de Santa Cruz de la Sierra, desde las cabañas hasta el límite con Warnes.
Más de 1.000 comunitarios que viven de la explotación de ripio, arena, arenilla y piedra en la cuenca del Piraí piden a las alcaldías ribereñas que ejerzan más control con la Ley de Áridos 3425 para evitar una mayor depredación.
A partir de la próxima semana, la mancomunidad metropolitana busca aprobar un reglamento para tomar el control de la cuenca del río, pues aparte del lecho también están destrozando la orilla con el desmonte.
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