Los más de mil marchistas indígenas que se encuentran varados en la hacienda Yenny, cerca de la comunidad de Yucumo, siguen sufriendo de sed porque los colonos e incluso los policías les ponen trabas para abastecerse de agua, según testimonios recogidos en la zona.
El secretario de Economía y Desarrollo de la Confederación Indígena de Bolivia (Cidob), Ernesto Sánchez, relató que para abastecer de agua a los marchistas, una comisión tenía que caminar 4 km y llenar recipientes, para distribuirlos a hombres, mujeres y niños. La provisión, de todas maneras, es insuficiente.
Indicó que este es el mayor inconveniente que tienen los marchistas, además del calor, enfermedades, falta de suficiente comida y alimentos.
Según Mariana Guasania, responsable de logística de la Cidob, lograron recibir cerca de 2.500 litros de agua, transportados desde la población de San Borja hasta San Miguel de Chaparina, pero no alcanzó para calmar la sed de la gente.
La falta de agua provocó que mujeres de la marcha intenten romper la barrera policial instalada sobre la carretera San Borja-Yucumo, en San Miguel de Chaparina, para llegar hasta un arroyo.
Sin médicos. Sánchez contó que las personas que están en esta movilización en defensa del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis), se encuentran sin médicos y tienen que automedicarse.
Dijo que algunos médicos que los acompañaban fueron expulsados por las bases, al considerar que "espiaban" para enviar reportes al Gobierno.
¿Acaso es una guerra? La decisión de los colonos de Yucumo y de los policías de bloquear el paso a los marchistas, lo mismo que los obstáculos para un normal abastecimiento, fueron criticados por el defensor del Pueblo de Beni, Luis Revollo. Aseguró que hasta en conflictos bélicos se permite ayuda humanitaria.
Pidió a la Policía flexibilizar su posición para que los indígenas puedan acceder sin restricciones a fuentes de agua.
Colonos inflexibles. Por su parte, el dirigente de los colonos, Gustavo Aliaga, dijo que si los indígenas no retiran cinco puntos de su pliego, que supuestamente los perjudica, "no pasarán" el bloqueo y tampoco se les devolverán la camioneta retenida de la ONG Fobomade que transportaba agua, comida y medicamentos. Aliaga aseguró que la "vigilia" permanecerá en la zona.
Otro intento. Según Erbol, el ministro de Comunicación, Iván Canelas, informó que el Gobierno aceptó el pedido de diálogo que hicieron los indígenas mediante una carta, por lo que hoy una comisión ministerial irá hasta Limoncito del Beni, para lograr el acercamiento con los marchistas.
'Son acciones fascistoides del Gobierno'
Dijo Waldo Albarracín sobre la privación de agua y alimentos a la marcha indígena, donde hay mujeres embarazadas y niños. Es toda una 'actitud criminal", afirmó.
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