Por tercera vez en su historia, el plantel de Oriente Petrolero participará en la Copa Sudamericana, porque consiguió clasificarse a la edición 2011 como subcampeón del campeonato Apertura, tras derrotar sin discusión a Bolívar por la cuenta de 2 a 0, anoche, en el estadio Ramón Aguilera Costas.
Con goles de Alcides Peña, a los ocho minutos, y Jhasmani Campos, a los 60´, el elenco cruceño se metió al bolsillo el pase al torneo sudamericano (2002, 2010 y 2011) de la mano del técnico Gustavo Quinteros, quien aplaudió el triunfo de sus dirigidos, aunque habría preferido la Copa Libertadores de América 2011 y el título de campeón, al igual que sus jugadores, quienes se marcharon a los camarines con un sabor amargo.
El cuadro albiverde prestaba atención a lo que ocurría en Cochabamba, porque de ese resultado dependía sus posibilidades de coronarse como campeón y tener el pase a la Copa Libertadores de América, para evitar sinsabores el plantel verdolaga prefirió resolver cuanto antes del cotejo y se encargó de abrir la cuenta por intermedio de Peña con un disparo bien dirigido, después de una buena habilitación del uruguayo Jorge Ramírez.
Con tres volantes punzantes; Marcelo Aguirre, Vaca y Campos la presión que ejercía el local sobre Bolívar fue constante y los momentos de alivió no fueron bien aprovechados por los celestes para ordenar su fútbol. Lastimosamente Ramírez y Campos no finalizaron el cotejo debido a lesiones.
En el pórtico de Bolívar Carlos Arias tuvo falencias para contener los remates; antes del segundo gol de Oriente Petrolero dio un rebote que no pudo conectar Ramírez, que de hacerlo habría amplió la diferencia en el marcador frente a un resignado elenco bolivarista.
En el tanto de Campos el golero de la Academia sólo pidió dos jugadores en la barrera, que se abrió y permitió al jugador cruceño tener un buen panorama para lanzar un remate potente y al ras del piso, que el guardameta no pudo contener. Se jugaba el minuto 60 y el cotejo estaba resuelto a favor de Oriente Petrolero.
La desesperación que colocó Bolívar para lograr el descuento no sirvió de nada, porque delante la defensa de los locales no concedió ni un centímetro y menos cuando ingreso Alex da Rosa, un jugador que puede hacer estragos si tiene espacio, algo que no tuvo en el estadio Ramón Aguilera Costas.
Algunos hinchas verdolagas no quedaron contentos con el subcampeonato, ni con la plaza a la Sudamericana, y derramaron lágrimas, mientras, otros lo festejaban, ante la tristeza de la Academia, que se quedó con las manos vacías en el Apertura. (APG).
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