El problema del acceso a la tierra y la vivienda para hogares desposeídos no puede ser resuelto dentro de la lógica del mercado de tierras, por lo cual se requiere una intervención contundente del Estado dentro de la lógica de la necesidad e interés social, que le permite en el marco de la CPE y las Leyes pertinentes preservar áreas dentro del territorio destinadas para programas de viviendas de interés social, equipamientos públicos, obras de infraestructura, y otras prioritarias para mejorar la calidad de vida de los pobladores (reversión de tierras por abandono o cambió de uso, expropiaciones e incautaciones fiscales).
La Constitución Política del Estado Plurinacional establece el derecho a la “vivienda digna” de todo ciudadano boliviano, pero hasta hoy los planes de Vivienda Social del Gobierno están destinados a grupos influyentes que solo pretenden hacer negocios con estas asignaciones del gasto público.
Existe una total falta de credibilidad sobre los planes de vivienda social en la población que demanda un lugar digno para su hábitat, siendo que más del 50% de la población urbana vive en cuartos de alquiler en nuestra ciudad (INE 2001).
Pese a que se está loteando toda la tierra de la periferia, el grueso de la población no tiene posibilidades de acceder a un lugar digno por la especulación inmobiliaria que se ve en esta actividad. Los loteos ilegales son una fuente de lucro fácil con absoluta complicidad de funcionarios municipales, que privilegian el gasto público, consolidando y haciendo cambio de uso de suelo en zonas donde hicieron sus negocios.
Estos asentamientos irregulares arrojan sus aguas contaminadas a los canales y pozos ciegos, contaminando los acuíferos subterráneos de donde el 75% de la población de Cochabamba se abastece de agua para vivir.
En los asentamientos del Parque Nacional Tunari el 53% de los predios tienen pozos ciegos, el resto arrojan sus aguas a los canales de las torrenteras.
En la zona sur beben agua también contaminada, que reciben en turriles a un costo de 10 bolivianos porque los “loteadores” no garantizan servicios
públicos y menos la legalidad en la posesión de los predios, generando conflictos sociales orquestados por estos “traficantes de tierras”; uno de los casos es el entorno del botadero de K´ara K´ara.
El precio de los lotes en Cochabamba en los últimos 5 años subió en 200% y los loteos en las zonas periurbanas se dan todos los fines de semana sin ningún control, Los traficantes de tierras gozan de absoluta impunidad sin que exista ninguna iniciativa del Estado para abordar contundentemente este problema.
La dinámica mercantil de las tierras vulnera cualquier normativa o plan de uso de suelo a través de prácticas dolosas y de tráfico de influencias, con mecanismos tales como: regularización municipal, ordenanza de cambió de uso de suelo, y permisividad de construcciones y edificaciones en sitios indebidos. De esta manera se invade áreas agrícolas pecuarias, forestales, franjas de seguridad de torrenteras y de ríos, botaderos de basura, terrenos fiscales: ferrocarriles, parques, áreas de recarga de acuíferos subterráneos, etc.
En esta situación urge que el Estado intervenga directamente con programas de vivienda social donde el suelo sea comunitario y no privatizado, además que oriente sus inversiones públicas hacia los sectores más desguarnecidos y no así en obras públicas que plusvaluan lugares de especulación inmobiliaria, ejemplo: agua y alcantarrillado en la zona sur, construcción masiva de vivienda de interés social en propiedad horizontal en zonas periurbanas y centros poblados, apoyo en la producción agropecuaria en zonas acosadas por los loteadores, racionalizar los accesos viales y dotar de equipamientos a los centros poblados y periurbanos.
VISION DEL PDV
Los programas de vivienda social tendrán el carácter de servicio publico por tanto no pueden ser objeto de mercantilización y sólo tendrán valor de uso y no de intercambió comercial.
MISIÓN DEL PDV
Planificar y materializar conjuntos habitacionales destinados a sectores impedidos de acceder a una unidad de vivienda en la estructura mercantil en los centros urbanos, que por su dimensión produzcan un impacto para que desestimule la especulación inmobiliaria.
LINEAS DE ACCIÓN
1. Que se creen zonas de reserva para vivienda social ecológica en suelo comunitario, en zonas de transición periurbana y municipios.
2. Dotación de infraestructura de gua potable y saneamiento básico para conjuntos habitacionales de propiedad horizontal con recuperación de aguas depuradas para recircular en uso que no sean de consumo humano.
3. Implementación de sistemas de aprovechamiento de energía renovable (solar y eólica) para calentar agua, generar energía eléctrica y producir biogás.
4. Estructurar espacialmente conjuntos habitacionales agrupando las viviendas en bloques de propiedad horizontal de fácil acceso peatonal, que permitan un adecuado control social de su vecindario.
5. Localizar densidades óptimas con máximo rendimiento del suelo de 5.00 a 7.00 habitantes por hectárea.
6. Aprovechamiento intensivo del suelo destinado a edificación de bloques de vivienda, dejando mayores proporciones para uso comunitario 60% a 70%.
7. Desarrollar programas de cultivos en huertas vecinales y forestería barrial en calles, áreas verdes y espacios comunitarios principalmente con especies de aprovechamiento de subproducto, como ser: frutos, semillas, etc.
8. Crear un banco de tierras administradas por el Estado para compensar o consolidar sitios destinados a los conjuntos habitacionales de vivienda social.
2. Dotación de infraestructura de gua potable y saneamiento básico para conjuntos habitacionales de propiedad horizontal con recuperación de aguas depuradas para recircular en uso que no sean de consumo humano.
3. Implementación de sistemas de aprovechamiento de energía renovable (solar y eólica) para calentar agua, generar energía eléctrica y producir biogás.
4. Estructurar espacialmente conjuntos habitacionales agrupando las viviendas en bloques de propiedad horizontal de fácil acceso peatonal, que permitan un adecuado control social de su vecindario.
5. Localizar densidades óptimas con máximo rendimiento del suelo de 5.00 a 7.00 habitantes por hectárea.
6. Aprovechamiento intensivo del suelo destinado a edificación de bloques de vivienda, dejando mayores proporciones para uso comunitario 60% a 70%.
7. Desarrollar programas de cultivos en huertas vecinales y forestería barrial en calles, áreas verdes y espacios comunitarios principalmente con especies de aprovechamiento de subproducto, como ser: frutos, semillas, etc.
8. Crear un banco de tierras administradas por el Estado para compensar o consolidar sitios destinados a los conjuntos habitacionales de vivienda social.
FINANCIAMIENTO
Se creara un banco departamental de vivienda social cuyo fin será constituir los fondos para capital de operaciones. También brindara recursos financieros para cubrir expropiaciones destinadas a vivienda social. En casos de venta de unidades habitacionales por adjudicatarios regulara esta operación para destinar la nueva adjudicación a sujetos que requieren este servicio público.
ESTRATEGIA DE MATERIALIZACIÓN DE LA PDV
1. Edificar proyectos de conjuntos habitacionales para grupos metas que permitan incorporar a sectores económicamente activos de la población urbana y rural para constituir barrios con identidad cultural y pertenencia de los grupos de vecinos.
2. Replicar la experiencia de los conjuntos construidos previo análisis y evaluación del diseño, proceso de materialización y experiencias habitacionales para superar errores.
3. Generar una nueva trama urbana en las zonas periféricas como un área de transición hacia las zonas agrícolas forestales y pecuarias evitando los loteos.
Aniceto Hinojosa, Presidente OINCO
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