Cada vez más bolivianos creen que los medios de comunicación y periodistas deben autorregularse, en lugar de que el gobierno los controle, según revela una investigación realizada por la empresa Encuestas & Estudios Gallup Internacional. Si en febrero el 63% opinó que los medios deben autorregularse y no el Gobierno, en octubre el 74% apuesta por este camino para corregir los errores en que incurren.
La empresa Encuestas & Estudios-Gallup International, presentó una encuesta aplicada en octubre a 1.177 personas en los departamentos de La Paz, El Alto, Cochabamba, Santa Cruz y Tarija. Otra similar se realizó en febrero, y por eso se pueden establecer datos comparativos.
En octubre de 2010, los medios de comunicación mantienen el segundo lugar en promedio (4.48 sobre 7) de confiabilidad, debajo de la Iglesia (4.74).
En comparación con el último estudio, realizado en febrero, los niveles de confianza en los medios no subieron ni bajaron, mientras que los de la iglesia subieron de 4.51 a 4.74.
En cuanto a los indicadores de libertad de expresión, en febrero de este año, el 33% de los encuestados respondió que en Bolivia no existía libertad de prensa. Esa percepción para el mes de octubre subió al 40%.
Entre esos meses también mejoró muy poco la percepción del manejo de la libertad de expresión. En febrero, el 55 por ciento de la población creía que se la utilizaba incorrectamente, mientras que en octubre el nivel bajó el 54 por ciento.
El estudio que fue realizado entre febrero y octubre de este año indica, asimismo, que un 56% de la gente percibe que hay libertad de prensa frente a un 40% que considera lo contrario.
No obstante, en febrero la percepción favorable a la libertad de prensa fue de 60%. Esta caída de cuatro puntos ocurre en siete meses y después de la puesta en vigencia de la Ley contra del Racismo que en su artículo 16, según organizaciones de periodistas, pone trabas a la libertad de opinión y expresión.
La encuesta indica que solamente un 18% de la gente está de acuerdo con una regulación gubernamental a la labor periodística y a la libertad de prensa.
El senador del MAS, Freddy Bersatti, dijo que los periodistas deben formar parte de la reglamentación de la Ley contra el Racismo y no autoregularse y expresó su incredulidad sobre las respuestas de la población. “Soy respetuoso de la libertad de expresión, realmente me sorprende esa encuesta porque entiendo que el primer concepto que defiende cualquier hombre es su libertad de expresión y debe ser regulada para dar información correcta”.
La Ley Contra el Racismo y Toda Forma de Discriminación, que ahora se encuentra en el Senado Nacional, tiene al menos cuatro disposiciones que amenazan con afectar el trabajo de los periodistas y medios de comunicación.
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