El desabastecimiento de azúcar vuelve a los mercados populares e incluso tiendas de barrios donde no se encuentra el producto denunciaron algunos vecinos. Este martes llegó un camión distribuidor de la empresa Guabirá al mercado Nuevo, ubicado a pocas cuadras de la plaza 24 de septiembre, entregando de a dos quintales por comerciantes a un precio de 208 bolivianos, denunciaron las comercializadoras que pedían vender a 6 bolivianos el quilo.
“No está llegando, hace rato que no entregan los camiones distribuidores. Los camiones nos dejan para 15 días sólo dos quintales”, reclama una comerciante.
La supervisora del municipio señora Morelly gestionó para que el camión deje dos quintales adicionales para vender al público, los cuales no alcanzaron por más de 15 minutos.
Los vecinos que llegaron al mercado Nuevo o se encontraban cerca pedían a empujones les vendan el producto que desde hace varios días no encuentran en los barrios alejados, sostuvo René Rocha del barrio Nuevo Progreso (octavo anillo). “En los barrios no encontramos azúcar ni para remedio, lo esconden y no sabemos que hacer”, lamenta el vecino.
Mientras que doña Melinda Roca explicó que desde el gasolinazo no existe el endulzante en las tiendas de abarrote. "Desde el gasolinazo que no hay el producto", sostiene.
En tanto el municipio asignó un supervisor en cada mercado popular encargado de regular la venta de los productos de la canasta familiar y en el caso especifico del azúcar a 5 bolivianos el quilo bajo sanción económica al comerciante que incumpla con una multa de 700 bolivianos la primera vez y el doble en caso de reincidir en la especulación.
La supervisora del municipio señora Morelly gestionó para que el camión deje dos quintales adicionales para vender al público, los cuales no alcanzaron por más de 15 minutos.
Los vecinos que llegaron al mercado Nuevo o se encontraban cerca pedían a empujones les vendan el producto que desde hace varios días no encuentran en los barrios alejados, sostuvo René Rocha del barrio Nuevo Progreso (octavo anillo). “En los barrios no encontramos azúcar ni para remedio, lo esconden y no sabemos que hacer”, lamenta el vecino.
Mientras que doña Melinda Roca explicó que desde el gasolinazo no existe el endulzante en las tiendas de abarrote. "Desde el gasolinazo que no hay el producto", sostiene.
En tanto el municipio asignó un supervisor en cada mercado popular encargado de regular la venta de los productos de la canasta familiar y en el caso especifico del azúcar a 5 bolivianos el quilo bajo sanción económica al comerciante que incumpla con una multa de 700 bolivianos la primera vez y el doble en caso de reincidir en la especulación.
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