La obra tiene un costo de 55 mil dólares aportados, por la Asociación para la Erradicación de la Pobreza (Apep) y la alcaldía municipal.
La nueva infraestructura brindará mejores condiciones a los profesionales que trabajan en esa repartición que hasta hoy funcionó en una dependencia municipal, que carecía de la privacidad necesaria para tratar temas delicados. Entre ellos, los problemas conyugales de parejas que recurren a la institución en busca de solución a sus diferencias, o en busca de atención psicológica a las víctimas de la violencia doméstica.
La ejecución de la nueva obra duró menos de tres meses, situación que sorprendió incluso a las propias autoridades municipales, refirió el funcionario Jaime Peña en contacto con Montero Noticias al confirmar que el acto inaugural contará con la presencia de las principales autoridades del municipio.
Los recursos para el financiamiento del nuevo edificio provienen de la comunidad española con las cuales trabaja la Apep y una importante suma económica del gobierno municipal como contraparte para asegurar el proyecto, enfatizó.
La Asociación para la Erradicación de la Pobreza (Apep) trabaja hace varios años en el municipio de General Saavedra y ha contribuido a la construcción de aulas escolares, viviendas para los maestros, entregó libro para la biblioteca central y las rurales y ahora anuncia también la construcción de sistemas de agua (tanque elevado y red matriz de distribución) en las comunidades de Santa Teresa, San Lorenzo y Callejón Avaroa.
En su momento la Apep junto a la Defensoría facilitó la otorgación de documentos personales a los párvulos como el certificado de nacimiento, y realizó talleres de capacitación a maestros y estudiantes en la problemática de la niñez, la infancia y la adolescencia.
Desde su nuevo edificio la Defensoría con su equipo multidisciplinario de trabajo conformado por una abogada, un sicólogo y una visitadora social, además de su trabajo normal brindará un apoyo especial en asistencia a los menores que llegan a los campamentos zafreros en compañía de sus padres, para que estos reciban la atención adecuada y eviten realizar tareas en la zafra cañera.
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