- Un teniente de Policía fue detenido por al menos ocho horas por conducir un vehículo con placas que no correspondían al motorizado.
El oficial Erick Salas Céspedes fue detenido en la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen, en primera instancia, pero horas después, la Fiscalía dispuso su libertad sin más problema.
Según el informe que ofreció la Policía, fue interceptado por efectivos de la Dirección de Prevención y Robo de Vehículos (Diprove), en las calles de la ciudad de La Paz, porque las placas que portaba el motorizado que conducía no le correspondían. El motorizado, al mismo tiempo, fue secuestrado.
El informe señala que “la naturaleza del hecho requirió secuestro del vehículo con fines investigativos. La placa de control 2272 YLA que portaba el vehículo, corresponde a otro motorizado”, reportó la red Uno.
El vehículo detenido es un Toyota modelo Yaris, de cuatro puertas, y color plomo.
Las fuentes consultadas no pudieron precisar el modelo del motorizado, pero al verlo se puede comprobar que es un vehículo que está bien cuidado.
En la página del Registro Único de Automotores (RUAT), se establece que la placa que portaba el motorizado corresponde a una vagoneta, también Toyota, pero 4x2 y de color perla; tipo Grand Hiace, modelo 1999, cinco puertas y reemplacado.
Además, tiene radicatoria en Oruro. En el formulario electrónico se establece que el sticker de la tercera placa se encuentra en el almacén del gobierno municipal de esa ciudad.
Por eso, el efectivo policial fue conducido a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen en calidad de arrestado.
Sin embargo, el caso pasó posteriormente a manos del fiscal Franz Contreras, quien después de analizarlo, según se informó ayer, dispuso ocho horas de arresto, como suficiente castigo para el oficial de Policía. “El fiscal adscrito dispuso el cumplimiento de ese arresto de ocho horas, y posteriormente su libertad”, estableció la Policía sin mayores explicaciones.
Éste no es el primer caso que involucra a uniformados en la tenencia de vehículos con placas que no corresponden. En este año, un caso similar que implicó al ayudante de Ciro Farfán, desencadenó su salida del cargo de comandante general de la Policía Boliviana.
NOTA: Pagina Siete
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