Hoy vemos que SE REINICIA LA JUDICIALIZACIÓN DE LA POLÍTICA, esta vez contra un ex presidente del Banco Central de Bolivia.
Cuando uno ve un acto aislado de la judicialización de la política del MAS, pareciera tener un verdadero deseo de justicia. Sus voceros son elocuentes, están bien entrenados, mentir no les causa ningún empacho, son unos verdaderos encantadores de serpientes.
Pero cuando uno mira todos los actos de judicialización de la política y tiene una visión panorámica de la realidad, la cosa le queda clara, este es un verdadero modus operandi de Morales y su gente.
Solo para citar algunos casos de esta visión panorámica: Jose Luis paredes, Manfred Reyes Villa, Leopoldo Fernández, Ana Melena, Ricardo Shimokawua y los más de 200 exilados en Brasil por el golpe de Estado a la gobernación de Pando, Banko Marincovic y los más de 50 exiliados por el Caso Rózsa-Soza, Rene Joaquino, Ernesto Suárez, Percy Fernández, Sabina Cuellar, Mario Cossio, Ruben Costas, Guido Nayar, Aydée Nava, Fidel Herrera, Jaime Barrón, John Cava, Rossío Pimentel, Jorge Morales, Bladimir Chávez, Nyls Carmona, etc., etc.
El Gobierno de Morales lanza contra sus opositores toda la fuerza de sus fiscales, jueces y policías cooptados. Son sus armas más efectivas para mantenerse en el poder y para destruir a la oposición. Es la receta clásica del chavismo trasnacional.
Utilizan el poder judicial como un arma represiva. Los procesos legales no tienen importancia, no los respetan. Aplica la ley con retroactividad, cambian leyes para hacerlas a medida de su venganza, no respeta los derechos humanos y el debido proceso. El Juez natural le importa un pito. Esta es la verdadera justicia de Evo Morales.
Presidente Morales, pare con esta práctica antidemocrática, respete la Carta Democrática Interamericana, aprenda a disentir en armonía. Dedique sus esfuerzos y los de su gobierno a causas más nobles.
Detenga al narcotráfico, frene la inseguridad ciudadana, para la destrucción de nuestros parques nacionales y reservas forestales, gobierne para todos, también para los indígenas del TIPNIS, sus dizque "hermanos".
Esa es su función. Usted es un presidente, no un emperador.
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