La estatua, cuya maqueta ya fue presentada en la provincia cochabambina de Quillacollo (centro), superará en tres metros a la escultura religiosa más grande de la región, que está en Venezuela, explicó a Efe el arquitecto Yuri Córdoba, que participa en el proyecto.
La Virgen de Urkupiña es una advocación boliviana de la Virgen de la Asunción que cuenta en el país andino con miles de devotos.
Esta iniciativa partió del arquitecto boliviano Lucio Meneses, quien propuso la idea en el año 2000 a las autoridades departamentales y eclesiásticas, aunque en ese momento no tuvo éxito.
Un grupo de personas entre las que figuraban arquitectos y representantes de la sociedad civil retomó la idea este año, y en esta ocasión sí lograron el apoyo necesario para poner en marcha la construcción de la estatua.
El escultor Rodolfo Araníbar es el autor de la maqueta en la que se basará el proyecto, para el cual ya se ha iniciado la primera fase de estudios orográficos y de resistencia al viento en la zona en la que se ubicará la estatua.
La escultura se levantará en el pueblo de Quillacollo, donde también está previsto construir una capilla.
Esta zona está enclavada en la Serranía de Cota, un área natural declarada Patrimonio nacional por su valor arqueológico, religioso y turístico.
Está previsto que a finales de agosto se celebre una romería folclórica para trasladar la maqueta de la estatua hasta la Serranía de Cota con el fin de que se convierta en la primera piedra de la construcción.
La maqueta es de fibra de vidrio y mide 2,35 metros.
A la iniciativa se sumó recientemente la Federación de Asociaciones Culturales de Bolivia en España (FACBE), mientras que el presidente boliviano, Evo Morales, también mostró la pasada semana su respaldo con la firma de un acta de apoyo.
Fuente : El Diario
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