La ciudad fronteriza de Yacuiba enfrenta una crisis económica y social debido al creciente contrabando de alimentos hacia Argentina. La fuga de productos cárnicos ha generado desabastecimiento en el mercado local, afectando directamente a los habitantes de esta región del Chaco boliviano. La situación ha llevado a un incremento en los precios de la canasta básica y ha puesto en alerta a las autoridades municipales y sectores productivos.
Desde el último trimestre de 2024, diversos sectores ya habían advertido sobre la fuga de alimentos bolivianos hacia Argentina. Este fenómeno se ha visto impulsado por la devaluación del peso argentino, que ha hecho que los productos bolivianos sean altamente atractivos para los consumidores del vecino país.
En un principio, la escasez se detectó en el municipio de Bermejo, pero tras la implementación de controles fronterizos por parte del Gobierno, el contrabando ha tomado nuevas rutas, afectando ahora a Yacuiba.
No hay carne para cocinar
El alcalde de Yacuiba, Carlos Brú, reconoció en una entrevista con Red Uno que el desabastecimiento de alimentos se ha convertido en un problema crítico. Enfatizó, que si la población no compra carne hasta las 9.00 de la mañana, ya no encuentra para cocinar.
Brú explicó que esta situación se debe a que ciudadanos argentinos cruzan la frontera y compran grandes cantidades de productos cárnicos, dejando a los yacuibeños con pocas opciones en los mercados.
Las rutas del contrabando
La diferencia de precios entre ambos países es el principal motor de este contrabando. Mientras que en Yacuiba el kilo de carne de res se vende hasta en 50 bolivianos, en Argentina su costo se eleva a un equivalente de 80 a 90 bolivianos. Esta brecha ha incentivado el tráfico ilegal de carne y otros productos básicos.
Los comerciantes locales han revelado que la carne de res y el pollo boliviano están siendo trasladados hacia Argentina en camiones, no a través de los pasos fronterizos oficiales de San José de Pocitos y Salvador Mazza, sino por rutas clandestinas utilizadas por los contrabandistas. Estos caminos ilegales permiten que grandes volúmenes de mercadería crucen la frontera sin ser detectados por las autoridades.
Escasez El alcalde Carlos Brú reconoce que si la población no compra carne hasta las 9:00 de la mañana, ya no encuentra para cocinar.
Sin embargo, el contrabando no solamente es de productos cárnicos sino también con los productos agrícolas. Una de las comerciantes que se dedica a la venta de hortalizas, tubérculos y verduras, explicó a El País, que en el caso del tomate, de cada tres camiones, dos prefiere venderlos al otro lado de la frontera a mejor precio, y dejar uno para el mercado local.
Consultada sobre los riesgos de llevar mercadería hacia el vecino país, señala que la mayoría de las personas que se dedican a esta actividad ya tienen fijadas las rutas, y que los controles en su mayoría se establecen en puntos fijos y no pueden cubrir los kilómetros y kilómetros de frontera. “Aparte si hacen controles, es solo una temporada, ellos no se quedan permanente. Aparte son hartas rutas y muchos camiones, imagínese cómo van a hacer para pararlos a todos”, dijo.
Quejas en el Concejo
Desde el Concejo Municipal de Yacuiba, la preocupación crece. En los últimos días, la entidad ha recibido al menos tres notas de sectores sociales denunciando el incremento desmesurado en la canasta básica, especialmente en los productos cárnicos.
El vicepresidente del Concejo, Rafael Pérez, indicó que han solicitado al alcalde Brú que convoque a una reunión interinstitucional con representantes de los sectores productivos para evaluar el impacto del contrabando y buscar soluciones.
“Hay una nota del Comité Cívico, de la Comisión de Servicios Generales y otra que yo he presentado, en unanimidad se ha decidido enviar una nota al Alcalde recomendando a que convoque a través de Odeco a los productores avícolas de granja, así también a los ganaderos para tener una reunión y hacer un análisis al respecto, para conocer los motivos a qué se debe la escasez de carne de res y pollo, porque en los últimos días ha habido desabastecimiento”, mencionó la autoridad.
Pérez señaló que si los productores reconocen que no tienen producción suficiente en las granjas de ese municipio chaqueño, lo que corresponde es que este producto se traiga de regiones en donde existe mayor producción para abastecer los mercados de Yacuiba.
“Sabemos que puede haber contrabandeo hacia Argentina, pero esto no significa que nosotros podemos quedar desabastecidos de este alimento primordial”, dijo Pérez a tiempo de advertir que si el alcalde Brú no llama a esta reunión, será el Concejo Municipal quien tomará la iniciativa.
Cívicos piden ferias del productor al consumidor
Por su parte, el Comité Cívico de Yacuiba ha propuesto la realización de ferias de abastecimiento los fines de semana. Henry Medrano, presidente de esta institución, señaló que la idea es que los productores locales vendan sus productos directamente a la población, evitando intermediarios y reduciendo el impacto del contrabando en los precios. Advirtiendo que son los intermediarios los que tienen mayor rédito económico que los mismos productores.
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