El director del Sedes, Nils Cazón, ha informado que se implementar un proyecto que es innovador en toda Latinoamérica en el que se busca colocar más de 170.000 collarines a canes en todo el Chaco, especialmente en Villamontes y regiones cercanas, donde se han reportado casos de leishmaniasis. El objetivo es prevenir la enfermedad y llevar a cero los contagios en la zona.
Asimismo ha recordado que la leishmaniasis tiene dos formas de presentación: la cutánea y la visceral. La primera se manifiesta con úlceras en la piel que no sanan en varios días, mientras que la segunda provoca una bajada de todos los elementos de la sangre, aumentando el tamaño de los órganos y produciendo hemorragias. La forma visceral puede llevar a la muerte, especialmente en niños y personas adultas.
Además ha dicho que los canes también desarrollan la enfermedad y son los principales reservorios del parasito, por lo que es importante protegerlos para evitar su contagio y el de los humanos. Cada seis meses se realizará una evaluación durante dos años para medir el impacto del proyecto en la reducción de los casos de leishmaniasis en la zona.
Así también ha señalado que el Servicio Departamental de Salud de Tarija está llevando a cabo un proyecto piloto en conjunto con la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para prevenir la leishmaniasis, una enfermedad transmitida por la picadura de un mosquito y los principales reservorios son los perros.
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