La Policía dispersó con gases lacrimógenos a los seguidores de Héctor Cartagena que bloqueaban la avenida Blanco Galindo para protestar contra el Movimiento Al Socialismo (MAS), que alejó de la Alcadía de Quillacollo al ganador de las elecciones del 4 de abril.
Es la primera vez que la Policía interviene para quitar los obstáculos con maquinaria pesada de la Alcaldía. El bloqueo en la carretera fue a partir de las 07:00 de ayer martes en el kilómetro once y medio por el río Huaykuli.
Un grupo reducido de sesenta personas, pusieron piedras, cascajo y arena sobre la avenida con el fin de impedir el tránsito de vehículos. Todo en repudio a la imposición del MAS en Quillacollo después de la sorpresiva posesión de Lorena Pinto como alcaldesa interina, tras suspender indefinidamente al alcalde electo Héctor Cartagena.
Cerca de dos horas después llegaron tropas policiales de refuerzo para garantizar que la avenida quede expedita.
Al observar la presencia policial y la maquinaria pesada, los manifestantes, que se encontraban en ambas vías, pusieron resistencia.
El director de la Unidad de Tránsito, coronel Miguel Cardozo, dialogó con los “cartagenistas” para que desistan de la medida y ocupen sólo una de las vías y la otra sería desbloqueada para permitir la circulación de los motorizados, a pesar de la resistencia, la Policía con la ayuda de la maquinaria empezó a “limpiar” la carretera que une Cochabamba con La Paz y Oruro.
Al momento de desbloquear la otra vía, los manifestantes se opusieron al desbloqueo e impidieron que la Policía continúe con la operación de limpieza.
¡Entiéndame, yo también soy quillacolleño pero tengo órdenes superiores para desbloquear!, explicaba Cardozo, sin embargo, los manifestantes, en su mayoría mujeres adultas y de la tercera edad empezaron a formar una barricada para impedir el paso de los policías.
¡Si eres quillacolleño debes entender que nuestra medida es justa!, ¡cumple con tu palabra, déjanos bloquear una vía!, decían las personas a Cardozo.
No fue suficiente ni las súplicas ni las protestas. Los policías empezaron a avanzar hacia los bloqueadores y con la ayuda de sus escudos los obligaron a retroceder.
La mayoría opuso vana resistencia. La Policía empleó la fuerza con la ayuda de gases lacrimógenos y sus macanas para reprimir la medida.
¡Nos vamos a defender!, ¡que se respete nuestro voto! ¡Evo nos enseñó a bloquear! empezaron a gritar mientras se resistían a la intervención policial. Algunos empezaron a lanzar piedras y los policías respondieron con gases lacrimógenos.
Una mujer recibió un golpe de un policía y cayó al piso sujetándose el abdomen.
Minutos más tarde la avenida pudo ser desbloqueada. Una persona fue detenida por lanzar piedras contra la Policía, pero después fue liberada.
Existió otros tres puntos de bloqueo en la avenida Blanco Galindo aunque de menor magnitud.
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