Desarrollo productivo pone a prueba credibilidad financiera de Bolivia a nivel internacional.
El representante del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Filip Dukesa, reconoció que Bolivia cuenta con tres fortalezas para enfrentar la crisis económica. Indicó que proyectar bonos del Tesoro General de la Nación (TGN) al exterior, pondrá en evidencia el nivel de credibilidad financiera de Bolivia.
En las perspectivas de crecimiento de la región, ningún país está exento de los niveles de reducción de crecimiento. Sin embargo, el 2008 Bolivia no percibió la crisis mundial de una manera significativa.
Bolivia, dijo, es un país que se encuentra aislado y no está contaminado, por los acontecimientos económicos externos, “pero los efectos negativos en las exportaciones e importaciones de los países vecinos, puede afectar la economía del país”.
Dukesa reconoció que Bolivia tiene tres pilares fundamentales, para enfrentar la crisis económica: la primera es el bajo nivel deuda externa, gracias a que en 2007 el BID, el Banco Interamericano Mundial (BIM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) le condonaron parte de la misma.
“Luego de la condonación hubo capacidad de generar recursos, que antes eran utilizados para pagar la deuda y ahora son destinados a la inversión”, dijo.
El segundo pilar se refiere al aislamiento del sistema financiero boliviano del resto mundo, por lo que los problemas internacionales no afectan profundamente a la economía del país, lo que se demuestra con las cifras registradas el 2008, que reflejan un crecimiento financiero en 3.6%, que lo dejó entre los países con mayor crecimiento en América Latina.
El tercer pilar se encuentra en los hidrocarburos, que según Dukesa, mantienen un precio estable y comparado, con relación a los precios internacionales.
Este efecto se manifiesta, porque el país tiene contratos con precios fijos, acordados hace varios meses atrás, lo que mantiene estabilidad en los precio de los hidrocarburos.
Con relación a las exportaciones, Dukeza, indicó que si bajan las exportaciones, los recursos del Estado experimentarán una reducción, por lo que “la política de invertir parte de los fondos del Tesoro General de la Nación (TGN), en bonos al exterior, sería una buena estrategia por parte del Gobierno”.
Sería “interesante” para Bolivia, dijo, observar cual es el nivel de credibilidad financiera del país en el exterior, porque es un dato de principal interés para los inversionistas internacionales.
“Bolivia está en una posición fiscal saludable, por lo que una emisión adicional de deuda no sería perjudicial para el sistema, porque de acuerdo al pronóstico del FMI, Bolivia proyecta una taza de crecimiento de 4,5 por ciento anual, por lo que no se debe esperar un escenario distinto para este año.
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