Protesta militar en Bolivia: ¿sedición o reclamo social?


Los soldados marcharon en La Paz (foto: AP)Hay cerca de 10.000 sargentos y suboficiales en Bolivia. (Foto: AP)

En Bolivia continúa creciendo la tensión después de que 702 militares de bajo rango fueran destituidos por las Fuerzas Armadas el jueves, acusados de "amotinamiento y sedición" por haber marchado en las calles en reclamo de "un trato igualitario".
A través de un comunicado, el Comando en Jefe de las Fuerzas Armadas acusó a los suboficiales y sargentos destituidos de "actos de sedición, motín, acción política" y de atentar "contra el honor de las fuerzas armadas".

Los soldados expulsados forman parte de un grupo de unos mil militares de bajo rango que durante los últimos días marcharon en las calles de La Paz, vestidos con sus uniformes, para denunciar una presunta discriminación en su contra y la destitución de un grupo de suboficiales que pedía cambios dentro del Ejército.
Los manifestantes, que convocaron más protestas, se quejan porque no pueden utilizar los mismos sanitarios que los oficiales, ni acceder a los mismos salones. También aseguran recibir una peor atención médica en los hospitales militares que los uniformados de mayor rango.
Además, exigen acceso a cursos de posgrado para poder ascender de rango, ya que en la actualidad solo pueden aspirar a ser sargentos o suboficiales, y piden poder formar parte del Tribunal de Justicia que en la actualidad sólo puede ser integrado por los jefes militares.
El comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, Víctor Baldivieso, afirmó el jueves por la noche durante una conferencia de prensa que "la discriminación no es pretexto para la sedición y promover un intento de golpe de Estado".
Pero ¿se trata de un alzamiento, como afirman las autoridades castrenses, o un simple reclamo laboral?
Para el experto en seguridad y fuerzas armadas de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA) Adam Isacson, no hay elementos para calificar estas protestas como actos de sedición.
"No es un acto de traición ni una acción que busca debilitar al Estado o derrocarlo", dijo a BBC Mundo.
Sin embargo, Isacson consideró que sí puede ser considerado un motín, ya que los militares no tienen derecho a realizar protestas y por ende se están sublevando y rompiendo los códigos militares y la Constitución.

"Desestabilización"

Evo Morales (foto: AP)
Morales pidió "disciplina" a las Fuerzas Armadas (foto: AP)
Quienes no dudaron en considerar las protestas como un "intento de golpe de Estado" fueron las organizaciones sociales cercanas al gobierno, que convocaron para el 1 de mayo una marcha para rechazar los reclamos.
"Convoco a todas las organizaciones departamentales, regionales y provinciales a concentrarnos en la ciudad de La Paz para ratificar la unidad del país, para no permitir ningún golpe de Estado", anunció este viernes el secretario ejecutivo de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia, Damián Condori.
Por su parte, la Central Obrera Boliviana (COB) y la Coordinadora Nacional por el Cambio (Conalcam), aseguraron a través de un documento que las protestas tienen objetivos y fines "contrarrevolucionarios".
"Están tratando de confundir al pueblo boliviano, utilizando bonitos discursos (democratización, descolonización) para alcanzar fines y objetivos contrarrevolucionarios como son la desestabilización del proceso de cambio que vive el país, del Gobierno del compañero Evo Morales, a través de la ruptura del mando constitucional y la disciplina al interior de las Fuerzas Armadas", afirmaron.
También la oficial Agencia Boliviana de Información calificó las protestas como "intentos de desestabilización".
Sin embargo, el presidente, Evo Morales, se mantuvo al margen del conflicto y apenas se refirió indirectamente a las protestas este viernes.
"Siento que la disciplina y la doctrina de las Fuerzas Armadas son tan importantes para nuestra querida Bolivia", declaró durante un acto en conmemoración por el 123 aniversario de la reapertura del Colegio Militar de Ejército, en La Paz.
"Si no hay disciplina no hay Fuerzas Armadas para Bolivia, si no hay doctrina del pueblo en las Fuerzas Armadas no hay Fuerzas Armadas para el pueblo de Bolivia", completó.

Dilema

Para Isacson, la demanda de los sargentos y suboficiales –que en total suman unos 10.000 uniformados- representa un dilema para el mandatario, el primero de origen indígena en la historia de Bolivia.
Soldado en Bolivia (foto: Reuters)
La mayoría de los soldados de bajo rango son de origen indígena. (foto: Reuters)
Es que el principal reclamo de quienes protestan es que se "descolonice" la institución castrense, que en la actualidad cuenta con muy pocos oficiales de origen indígena.
"La mayoría de los oficiales son mestizos o de descendencia europea, mientras que los militares de bajo rango son casi en su mayoría quechuas o aymaras", señaló el experto.
Muchos reconocen que en las fuerzas armadas se discrimina a los estamentos más bajos, una situación que es similar en muchos países de la región en donde los soldados de rango menor suelen ser de sangre indígena.
Incluso el ministro de Defensa, Rubén Saavedra, admitió que hay desigualdades pero aseguró que la situación está cambiando y que en 2015 los sargentos y suboficiales accederán a becas para estudiar en las mismas condiciones que los oficiales.
Saavedra también dijo que hace meses se conformó una comisión militar compuesta por oficiales, suboficiales y sargentos, que trabaja en un proyecto para modificar la Ley Orgánica de las FF.AA., otro de los reclamos de la protesta.
Según Isacson, la dificultad para el gobierno es que no puede realizar demasiadas concesiones a los militares de bajo rango sin generar tensiones con los altos mandos.

El experto también vinculó las demandas con el reciente aumento del salario mínimo y dijo que la protesta se da en el contexto de la contienda preelectoral por los próximos comicios generales de octubre

0 Comentarios

Leer Noticias : × +