Las microfinancieras que operan en el país alertaron sobre una nueva norma aprobada por la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) que establece que los créditos deben ser aprobados y calculados de acuerdo a la declaración financiera y patrimonial de los clientes al Servicio de Impuestos Nacionales (SIN).
La circular ASFI/DNP/91/2011 instruye a las entidades financieras establecer políticas para disponer de esa información para el caso de personas naturales con actividad independiente o jurídicas con Número de Identificación Tributaria (NIT), es decir que la determinación afectaría especialmente a microempresarios y comerciantes del sector informal.
La Asociación de Entidades Financieras Especializadas en Microfinanzas de Bolivia (Asofin) advirtió en un comunicado de que en caso de que la normativa sea interpretada como una exigencia para todos los clientes podría tener un efecto preocupante en el sistema microfinanciero que trabaja con el sector informal de la economía que no tributa, con clientes que están en el régimen simplificado y cuyo movimiento es mínimo o que no poseen identificación tributaria.
El presidente de Asofin, Nelson Hinojosa, dijo que la interpretación de la resolución no es clara e informó que la organización ha solicitado una reunión a la ASFI para aclarar los alcances de la norma y plantear alternativas técnicas que permitan lograr los objetivos que tiene la norma sin causar perjuicios a los cientos de miles de clientes de las microfinanzas.
“Confiamos en que las autoridades comprenderán nuestra posición y entre todos canalizaremos esta iniciativa en un sentido positivo para el país y el sector”, dijo.
Analistas consultados por Los Tiempos indicaron que si la normativa es aplicada, el efecto recaerá en todo el sistema financiero debido a que, en general, la capacidad de pago será fijada a partir de las compras y ventas de los demandantes de crédito declaradas a la renta.
Esto, indicaron, reducirá mucho la capacidad de endeudamiento de los microempresarios e incluso de las pequeñas y medianas empresas (Pymes) y en algunos casos podría eliminarse la posibilidad de financiamiento de estos sectores que facturan un porcentaje mínimo de sus ventas y en muchos casos ni siquiera declaran aunque tengan NIT.
LOS PRÉSTAMOS CRECEN MENOS QUE DEPÓSITOS
En los últimos cinco años y medio, el número de cuentas en el sistema bancario nacional se cuadriplicó, pasando de 779.130 cuentas en diciembre de 2005 a 3.119.237 cuentas a junio de 2011, informó ayer la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban).
En cuanto al número de prestatarios, el crecimiento fue menor: se duplicó en el mismo período pasando de 295.993 a 582.429.
Asoban indicó que los depósitos crecieron tres veces en los últimos cinco años y ocho meses, subiendo desde 2.879 millones de dólares en diciembre de 2005 hasta 8.243 millones de dólares en agosto de 2011, mientras que la cartera de créditos creció 2,4 veces en ese lapso, desde 2.595 millones de dólares hasta 6.283 millones.
Paralelamente, el número de oficinas de los bancos se duplicó, elevándose desde 282 a 568 agencias, que forman parte de una gran red de 2.067 puntos de atención.
“Las cifras expuestas permiten apreciar claramente que existe la voluntad de la banca de continuar profundizando el proceso de bancarización como lo viene haciendo hasta ahora”, destacó Marcelo Montero, secretario ejecutivo de Asoban, según un comunicado de prensa de la entidad.
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