Los universitarios que destrozaron los ambientes del local La Riviera donde se desarrolla el XXX Congreso de la Confederación de Universitarios de Bolivia (CUB), se niegan a pagar los daños que ocasionaron el 23 de junio. Las pérdidas llegan a los Bs 13 mil.
Los responsables de los hechos vandálicos registrados el pasado miercóles son estudiantes y dirigentes de las universidades estatales de El Alto, Santa Cruz, Sucre y Potosí. Más de 20 universitarios fueron detenidos, varios de ellos portando cachorros de dinamita. Hasta ayer, sólo uno permanecía en celdas de la Policía acusado de sustraer la radio de uno de los policías que intervino el lugar. Los estudiantes se niegan a pagar los daños que ocasionaron a la infraestructura de La Riviera, bajo el argumento de que el propietario fue advertido, desde el pasado lunes, para que anule el contrato de alquiler porque el Congreso fue declarado ilegal. "Nosotros le advertimos, le dijimos que cierre sus puertas, pero no hizo caso", dijo el dirigente de la Universidad Tomás Frías de Potosí, Ronald Ávila. Seis universidades se desmarcaron del Congreso, mientras que de Cochabamba, Beni, Tarija y algunos estudiantes de La Paz continúan unidos. Según los disidentes, el Congreso fue suspendido, pero el otro grupo continúa deliberaciones asegurando que todo es legal.
Nota : Opinion |
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