Un gol tempranero de Chumacero le dio la victoria. Bolívar estuvo cerca de la igualdad
El Tigre sacó tajada de un ‘gol de camarín’, obra de Chumacero a los 6 minutos, para vencer a Bolívar (1-0) en el clásico de ida de la Copa AeroSur, jugado anoche en el estadio Félix Capriles de Cochabamba, y resistió todo lo que pudo en el segundo período, que lo afrontó con un hombre menos por la expulsión (33’PT) de Reyes.
La historia pudo haber sido otra, pues la Academia —en su primer partido de la nueva temporada y con varios jugadores de reserva— se perdió el empate desperdiciando varias opciones de las que dispuso en la segunda mitad, sobre todo en la recta final.
The Strongest jugó su tercer cotejo antes de afrontar la próxima semana su debut en la Copa Sudamericana, y volvió a sufrir una expulsión, que no es un detalle menor. Contra San José, ida y vuelta, ya le había sucedido, y volvió a tener esa carga adicional ayer, dejando la interrogante sobre qué podría suceder si terminara jugando con todas sus fichas.
El partido tuvo dos caras, la primera de ellas fue favorable al Tigre. Se notó que el cuadro de Mauricio Soria tenía —dados sus amistosos anteriores— más recorrido futbolístico frente a una Academia que no jugó nada con carácter previo y aunque se preparó durante varias semanas, solamente contó con su técnico un par de días antes, por el retraso de éste en volver desde España para retomar su trabajo.
Una jugada lujosa sirvió para que se abriera la cuenta, tocaron bien Escobar y Soliz, y la pelota le quedó a Chumacero, que frente a Argüello no se equivocó para luego ir a celebrar.
Pudo haber llegado el empate en una jugada insólita, un largo despeje de Cabrera, desde su área, buscando en la otra a Córdoba, la pelota picó de tal forma que se le pasó a Vaca, quien había salido lejos del marco, aunque el uno tuvo la reacción suficiente para evitar a tiempo el gol.
En el primer período las mejores opciones —al menos tres— fueron del Tigre, incluso tras la expulsión de Reyes. La más clara se la ‘comió’ De Souza en el filo mismo. Bolívar fue más en el segundo, Lizio desequilibró —y remató mal—, y Castillo cabeceó desviado solo ante el arco de Vaca, aunque luego el Pícaro metió una ‘chilena’ que hubiera sido espectacular si anotaba.
The Strongest apenas contó con una llegada de Soliz después de una buena acción del chileno González. Hubo un ganador dado aquel comienzo. Si de justicia se trata, había lugar mínimo para un empate.
Los datos
¿Se conocen?
Sí. Castillo y Córdoba han transitado varias prácticas juntos y tal vez ya son amigos, pero en la cancha aún no se entienden. El colombiano tiende a agarrar mucho la pelota; al boliviano, ayer le costó tenerla. Ferreira, que acaba de volver, tiene un sitio seguro.
‘Chamagol’
El chileno de The Strongest jugó todo el segundo tiempo, se lo notó cuando a los 22 minutos le puso un gran pase a Soliz, y éste falló por poco. Aparte de eso, González estuvo ‘ausente’.
Destacado - Alejandro Chumacero
Para comenzar, buena la definición para el 1-0. Después fue un motor en el medio y sacrificado a partir de la expulsión de Reyes.
El árbitro - regular
Raúl Orosco llegó al clásico aún con la resaca de su buena actuación en la Copa América. Para anotarlo de manera elegante: estuvo en otra.
Un cotejo con poca llegada y varios goles perdidos
Los datos
¿Se conocen?
Sí. Castillo y Córdoba han transitado varias prácticas juntos y tal vez ya son amigos, pero en la cancha aún no se entienden. El colombiano tiende a agarrar mucho la pelota; al boliviano, ayer le costó tenerla. Ferreira, que acaba de volver, tiene un sitio seguro.
‘Chamagol’
El chileno de The Strongest jugó todo el segundo tiempo, se lo notó cuando a los 22 minutos le puso un gran pase a Soliz, y éste falló por poco. Aparte de eso, González estuvo ‘ausente’.
Destacado - Alejandro Chumacero
Para comenzar, buena la definición para el 1-0. Después fue un motor en el medio y sacrificado a partir de la expulsión de Reyes.
El árbitro - regular
Raúl Orosco llegó al clásico aún con la resaca de su buena actuación en la Copa América. Para anotarlo de manera elegante: estuvo en otra.
Un cotejo con poca llegada y varios goles perdidos
En un partido con escasa vocación ofensiva fueron notorios los goles errados, de parte de unos y de otros. Llamativa fue aquella jugada a los 42 minutos del primer período, cuando Pablo Escobar lanzó un centro perfecto para la cabeza de Regis, y el brasileño cabeceó al aire. Hoy todavía debe estar pensando a dónde fue a parar ese ‘frentazo’. Al margen de lo anecdótico, pudo haber sido el 2-0 para el Tigre.
Lo de Castillo fue más, no le pudo dar al balón a los 15, y aunque es un especialista, a los 32’ del segundo período resolvió un centro de Lizio con un cabezazo que mandó la redonda junto a uno de los palos (claro que casi se saca el clavo con una chilena rato después).
No hay que olvidar la de Lizio, que hizo todo bien, excepto rematar, su disparo fue a parar lejos del arco... se perdió en el lateral.
Reyes, ‘fiel’ a las tarjetas rojas
Por enésima vez
Leonel Reyes tiene ‘afecto’ por las expulsiones, en la Liga cosecha una buena cantidad y ayer vio una directa por supuestamente agredir a Álvarez. El volante atigrado se perderá, por tal motivo, la revancha.
¡Cómo pegaban!
En Bolívar hubo algunos que se salvaron de ver la roja. Anotado de otra manera: Orosco, el árbitro, tuvo contemplación con algunos celestes. En la primera parte las patadas las repartían los de la Academia... y dolían.
Medio inclinado
Ver el video será suficiente para que el árbitro se dé cuenta de que cobró desigual y que Bolívar fue el beneficiado. Y uno de sus asistentes notará que más bien perjudicó a la Academia.
Daniel Vaca
‘Vencer al tradicional rival, motiva’
Por poco me sorprende ese pelotazo (a los 14 minutos). Fue una jugada rara, vi que el atacante se adelantaba, así que decidí salir para anticiparme a la jugada, pero la pelota dio un bote y me engañó; felizmente pude sacarla antes de que ingrese. Es importante la victoria, porque vencer al tradicional rival motiva.
Mauricio Soria
‘El equipo mostró algunas sociedades’
Hicimos un buen partido pese a que jugamos 60 minutos con un hombre menos, así que aprovechamos para aplicar varios dibujos. El equipo tuvo entrega, además se mostró algunas sociedades que sin duda serán importantes para el andamiaje posterior. Creo que estamos creciendo en la medida que los partidos avanzan, pero debemos corregir algunos aspectos.
Marcos Argüello:
‘Ellos no existieron en el campo’
Se trata de una derrota en un partido en el cual fuimos superiores, todo el tiempo atacamos; en cambio, ellos no existieron en el campo de juego. Jugamos bien, pero el fútbol es así, tuvimos opciones que no supimos concretar. Seguramente iremos mejorando partido a partido, pero merecíamos otro resultado.
Ángel G. Hoyos
‘Merecíamos ganar, nos faltó definir’
Los partidos se ganan por merecimientos, nosotros merecíamos ganar, pero nos faltó en la parte de definición, en las opciones que creamos ante el arco rival. Jugamos tras un prolongado receso y salimos de una exigente pretemporada, aquello se notó en el accionar individual y colectivo, seguramente iremos mejorando y alcanzaremos los objetivos que la hinchada desea.
Timbre de alerta
Lorenzo Carri
Los dos equipos tendrán que revisar lo ocurrido anoche, en un partido que no tuvo atractivos. El ganador, The Strongest, porque hizo una buena primera etapa y se aferró al uno-cero muy temprano: salvo una incursión de Nelvin Soliz en la segunda etapa —tuvo el gol en sus pies y desvió el remate— no llegó prácticamente nunca al área celeste.
Por enésima vez
Leonel Reyes tiene ‘afecto’ por las expulsiones, en la Liga cosecha una buena cantidad y ayer vio una directa por supuestamente agredir a Álvarez. El volante atigrado se perderá, por tal motivo, la revancha.
¡Cómo pegaban!
En Bolívar hubo algunos que se salvaron de ver la roja. Anotado de otra manera: Orosco, el árbitro, tuvo contemplación con algunos celestes. En la primera parte las patadas las repartían los de la Academia... y dolían.
Medio inclinado
Ver el video será suficiente para que el árbitro se dé cuenta de que cobró desigual y que Bolívar fue el beneficiado. Y uno de sus asistentes notará que más bien perjudicó a la Academia.
Daniel Vaca
‘Vencer al tradicional rival, motiva’
Por poco me sorprende ese pelotazo (a los 14 minutos). Fue una jugada rara, vi que el atacante se adelantaba, así que decidí salir para anticiparme a la jugada, pero la pelota dio un bote y me engañó; felizmente pude sacarla antes de que ingrese. Es importante la victoria, porque vencer al tradicional rival motiva.
Mauricio Soria
‘El equipo mostró algunas sociedades’
Hicimos un buen partido pese a que jugamos 60 minutos con un hombre menos, así que aprovechamos para aplicar varios dibujos. El equipo tuvo entrega, además se mostró algunas sociedades que sin duda serán importantes para el andamiaje posterior. Creo que estamos creciendo en la medida que los partidos avanzan, pero debemos corregir algunos aspectos.
Marcos Argüello:
‘Ellos no existieron en el campo’
Se trata de una derrota en un partido en el cual fuimos superiores, todo el tiempo atacamos; en cambio, ellos no existieron en el campo de juego. Jugamos bien, pero el fútbol es así, tuvimos opciones que no supimos concretar. Seguramente iremos mejorando partido a partido, pero merecíamos otro resultado.
Ángel G. Hoyos
‘Merecíamos ganar, nos faltó definir’
Los partidos se ganan por merecimientos, nosotros merecíamos ganar, pero nos faltó en la parte de definición, en las opciones que creamos ante el arco rival. Jugamos tras un prolongado receso y salimos de una exigente pretemporada, aquello se notó en el accionar individual y colectivo, seguramente iremos mejorando y alcanzaremos los objetivos que la hinchada desea.
Timbre de alerta
Lorenzo Carri
Los dos equipos tendrán que revisar lo ocurrido anoche, en un partido que no tuvo atractivos. El ganador, The Strongest, porque hizo una buena primera etapa y se aferró al uno-cero muy temprano: salvo una incursión de Nelvin Soliz en la segunda etapa —tuvo el gol en sus pies y desvió el remate— no llegó prácticamente nunca al área celeste.
Se debe haber planteado, en el intermedio, dos cosas: que estaba ganando, y en un partido como el de ayer eso no es cosa sencilla, y que había quedado con diez jugadores (expulsión de Leonel Reyes en la primera etapa), y “con diez hombres es muy complicado”. Una frase que anoche no tenía asidero, porque pudo haber jugado con nueve sin pasar angustias.
El perdedor, por supuesto, tendrá que analizar por partida doble lo sucedido. Ensayó una defensa inédita, que en el primer tiempo sufrió mucho. Tuvo un medio campo sin trascendencia, y su carta de fútbol, Damián Lizio, se debe haber preguntado toda la noche con quiénes podía jugar.
(Para cierta tranquilidad de los bolivaristas, ha vuelto Ferreira. Porque lo de José Alfredo Castillo no es solución —y no pienso solamente en la ocasión de gol que despilfarró ante un centro soberbio de Lizio— y lo de John Córdoba es una incógnita. Tiene un cierto parecido con el Addles atigrado de los torneos anteriores, pero es demasiado partidario de la acción individual. Y anoche no pasó).
The Strongest tuvo en Chumacero a su valor principal, y no pienso únicamente en el gol que marcó, aunque trata de hacer muchas cosas a una velocidad superior a la aconsejada. Pablo Escobar va a ser útil, si no lo arrinconan junto a la línea. No se sabe (no se supo anoche) lo que puede rendir González, y el técnico va a tener una ardua tarea con la ubicación de Regis y Ramallo en relación con Escobar.
Anoche, en el ‘Capriles’, sonó la alarma, y sería bueno que el ganador no se conforme con esa victoria económica, y que el derrotado no se consuele pensando en que fue un partido de pretemporada.
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