La historia de nuestra bandera marca un primer cambio de la enseña a casi un año de la vigencia de la primera, cuando el 25 de julio de l826 se determina que la insignia boliviana tendría tres franjas iguales, la superior amarilla, rojo punzó al centro y verde en la parte inferior, justificativos al cambio no hubieron en detalles convincentes, La Convención Nacional que se reunió precisamente en Oruro en octubre de 1851, analizó y aprobó la sugerencia del entonces Presidente de Bolivia, que con justificaciones valederas, propuso el cambio definitivo en nuestra bandera, propugnando la tricolor nacional con el rojo punzó en la parte superior que representa la sangre derramada por los héroes para el nacimiento y la preservación de la República; la franja amarilla al centro representa nuestra riquezas y recursos naturales, mientras que la franja verde inferior es la muestra de nuestra rica naturaleza y la esperanza como un valor principal de nuestra sociedad.
Un hecho trascendental es que la nueva tricolor boliviana corresponde a una ley promulgada por el Presidente Manuel Isidoro Belzu un 5 de noviembre del año 1851, disponiéndose además que la misma fuera izada por vez primera en el Faro del Conchupata en la ciudad de Oruro.
La relación histórica de la República, la Bandera Nacional y Oruro es altamente significativa y es aquí donde debe rendirse el mayor homenaje a la tricolor de Bolivia renovando los sentimientos cívicos y patrióticos que reconocen un solo emblema como parte inconfundible de la identidad de la Nación, del territorio, de su gente y de sus derechos y sus esperanzas.
Historiadores, libre pensadores, políticos de renombre, ex mandatarios, bolivianos connotados coinciden en su apreciación de reconocer para Bolivia una sola bandera, la enseña oficial que flamea con sus tres franjas rojo, amarillo y verde, además en el caso de ser izada en edificios gubernamentales y militares incluye en la franja central el Escudo de Bolivia en ambas caras.
El pabellón nacional es motivo de orgullo, es parte del tesoro cívico que tiene cada boliviano, es la identidad de una Patria libre y soberana, es el símbolo de nuestra nacionalidad por encima de eufóricos intentos de suplantarla.
Para los orureños el Día de la Bandera tiene especial significado pues la bandera que defendemos ahora y la defenderemos siempre data de noviembre de 1851, una fecha que además debería ser tomada en cuenta con mayor relevancia en el futuro, porque el privilegio de que la nueva tricolor fuese izada en Oruro es la muestra más grande del valor que desde entonces se dio a nuestra Bandera Boliviana como símbolo de unidad, libertad e independencia.
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